Madrid, 27 nov (EFE).- El cáncer gástrico es el quinto en incidencia a nivel mundial y el duodécimo en España y en el que el diagnóstico precoz "es su punto negro", ya que en muchas ocasiones, cuando se detecta, es demasiado tarde.
Lo han puesto de manifiesto expertos y pacientes en la jornada "Retos en cáncer gástrico", organizada por EFE en colaboración con la farmacéutica Bristol Myers Squibb (BMS) para abordar este tipo de tumor, que es menos visible que otros, conlleva graves secuelas y el 28 de noviembre se conmemora el día internacional.
"El cáncer gástrico es un problema de salud porque hay necesidades no cubiertas y hay muy poca concienciación", ha asegurado la oncóloga del Complejo Hospitalario Universitario de Orense Ana Fernández, quien ha participado en el evento junto a la presidenta de la Asociación contra el Cáncer Gástrico y Gastrectomizados (ACCGG), Pilar Ruiz, y el director de la Unidad de Oncología de la farmacéutica, Fernando Granell.
En España la incidencia no es tan alta como en Asia, donde en países como Corea o Japón afecta a 50 personas de cada 100.000, pero sí es intermedia, y es más común en hombres mayores de 50 años.
Sin embargo, ha alertado la doctora Fernández, desde finales de los años 90 en todos los países se ha detectado un aumento de casos en personas por debajo de esos 50 años, "incluso de los 40", algo que es, en palabras de la oncóloga, "alarmante, porque hace unas décadas no sucedía".
De hecho a la presidenta de la ACCGG le diagnosticaron el tumor con 36 años y tenía síntomas desde años antes, pero como éstos son similares a otras patologías y ella era joven, los médicos en un principio no le hicieron las pruebas para detectarlo.
Por eso, Pilar Ruiz ha reclamado un protocolo unitario para los pacientes que tengan unos síntomas determinados durante seis meses e independientemente de la edad sean derivados de Atención Primaria al especialista, con el fin de que les realicen una gastroscopia.
"La Sanidad funciona bien cuando lo han diagnosticado, pero el punto negro es el diagnostico precoz", ha insistido Pilar Ruiz, quien ha hecho hincapié en que el impacto de este tipo de cáncer, que en la mayoría de los casos conlleva la extirpación total o parcial del estómago, es "devastador".
La oncóloga ha coincido con ella en que uno de los retos y "la mayor debilidad" en el abordaje de este tumor es el diagnóstico precoz, pero también ha querido lanzar "un mensaje de esperanza" porque en los últimos años ha habido muchos avances en los tratamientos y con la medicina personalizada, que han aumentado la supervivencia.
En el mismo sentido se ha pronunciado el director de la Unidad de Oncología de BMS, que ha incidido en que es un tipo de cáncer con mal pronóstico y que, ya en 2022, el Plan Europeo de Lucha contra el Cáncer destacó que hay que abordar este tumor de manera urgente, porque es uno de los más letales.
"La inmunoterapia brinda un oportunidad muy importante para los pacientes", ha asegurado Fernando Granell, quien ha recalcado que, sin la excelencia de los investigadores que hay en España, la investigación y desarrollo no sería posible.
La presidenta de la asociación de pacientes ha lamentado que la innovación tarde en llegar en muchos casos a los afectados, de hecho la oncóloga ha afirmado en este punto que España tiene dos años de decalaje desde que se aprueba el medicamento hasta que es financiado por el sistema.
"Es un camino complejo y se está haciendo un esfuerzo por los profesionales y desde las sociedades para intentar acortar esos tiempos", ha abundado Ana Fernández.
Por su parte, Granell ha señalado que BMS trabaja con las administraciones para acelerar la llegada de la innovación a los pacientes y hacer iniciativas que sean eficientes "desde todos los puntos de vista". EFE
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