Barcelona, 27 nov (EFE).- El Barça llegará al clásico europeo de este jueves (20:45 horas) en el Palau Blaugrana frente al Real Madrid con la novedad del base brasileño Raul Neto, fichado el pasado lunes, y con la obligación de mejorar en defensa después de haber encajado un mínimo de 99 puntos en los tres últimos partidos.
El internacional brasileño, que llega procedente del Esporte Clube Pinheiros de su país tras perderse la temporada pasada por una grave lesión de rodilla, se ha entrenado esta semana con el resto de sus compañeros y estará a disposición del técnico Joan Peñarroya.
Mermado por las bajas del base Nico Laprovittola para lo que resta de temporada y del ala-pívot Chimezie Metu hasta 2025, el conjunto catalán ha entrado en una espiral de irregularidad que le ha llevado a alternar dos victorias ante el Partizan (79-87) y el Valencia Basket (99-102) con tres derrotas ante el Río Breogán (77-70), el París Basketball (87-103) y el Bayern Múnich (100-78) en los cinco últimos partidos entre todas las competiciones.
Los tropiezos ante el París y el Bayern han relegado al Barça a la octava plaza (7-4), empatado con el quinto clasificado y a dos victorias del líder, el Fenerbahce Beko Estambul (9-2), mientras que el Real Madrid, finalista de la pasada edición, es décimo (5-6) tras haber perdido los cinco duelos que ha disputado a domicilio. Una prueba más de la igualdad que caracteriza la Euroliga.
Las opciones del conjunto azulgrana pasan por mejorar la defensa, en especial en el perímetro, después de haber encajado 34 puntos y once triples del alero Andreas Obst en Múnich. No será fácil, ya que el Real Madrid reúne a algunos de los mejores anotadores de la competición, como Dzanan Musa (13,7 puntos) y Mario Hezonja (12,7).
La labor defensiva de los bases Tomas Satoransky y Juan Núñez en el marcaje sobre el argentino Facundo Campazzo, el tercer máximo asistente de la Euroliga (7,5 pases de canasta y 13,5 puntos) puede ser determinante, al igual que el duelo en la pintura entre el pívot blanco Walter Tavares (9,9 puntos y 7,5 rebotes) y el azulgrana Jan Vesely (9,9 y 3,9).
El Barça es un equipo que brilla cuando puede correr, y para ello será indispensable controlar el rebote y recuperar balones. Por algo los de Joan Peñarroya lideran la Euroliga en robos (8,6) y son el segundo que más asistencias reparte (21,1), un escalón por encima del conjunto madridista (20).
Azulgranas y blancos están bastante igualados en lo que a puntos anotados (85,7 a 83,8) y encajados (84,4 a 82,2) se refiere, pero el conjunto dirigido por Chus Mateo destaca por su índice de acierto en la zona (58,1% a 62,1%), mientras el cuadro catalán tiene mejor porcentaje desde el perímetro (38,3% a 33,6%).
En ataque, el Barça necesitará la mejor versión de sus dos líderes ofensivos: el ala-pívot Jabari Parker, que promedia 13,9 puntos y anotó 26 en Múnich; y el escolta Kevin Punter, máximo anotador del equipo con una media de 15,8 tantos, que tratará de reaccionar tras una mala noche en Alemania (7 puntos y 2/13 en tiros de campo). EFE