Madrid, 26 nov (EFE).- Las mujeres migrantes no se ven reflejadas en las campañas de violencia de género, tanto por el tono como por el perfil de víctima que suelen mostrar, por eso la Unión de Asociaciones Familiares (UNAF) ha puesto en marcha un proyecto para ayudar a identificar las violencias a través de conversaciones cotidianas entre amigas.
La campaña '#cuéntaseloatuamiga', presentada este martes en Madrid, se compone de ocho historias de violencia sobre la mujer en las que dos amigas hablan a través de mensajería instantánea de situaciones violentas: una le cuenta a otra lo que está sufriendo y la otra le pone palabras a la violencia y le ofrece recursos a los que puede acudir para que la ayuden.
Acoso sexual laboral, sexismo racista, matrimonio forzoso, mutilación genital femenina, violencia económica, sexting o violencia sexual son cuestiones que se abordan en estas conversaciones naturales y de sororidad entre amigas.
"Aquí está tu amiga para ayudarte", contesta una chica cuando otra le manda un mensaje de audio en el que comparte con ella su rabia tras experimentar una situación de cosificación sexual y racista en el trabajo.
Este es el espíritu que atraviesa cada uno de los vídeos creados por UNAF para llegar a mujeres migrantes y racializadas que puedan estar viviendo una situación de violencia machista.
Una trabajadora interna acosada sexualmente por el empleador, una mujer a la que el marido obliga a mantener relaciones sexuales sin métodos anticonceptivos a pesar de que no quiere tener más hijos, una joven a la que su tía quiere casar con un hombre en el extranjero, una adolescente a la que un tipo amenaza con publicar fotos íntimas o una señora a la que su marido le quita el abono transporte y no le da dinero son algunas de las historias narradas.
Todos los vídeos están disponibles en español, inglés, francés, chino, árabe, ucraniano y bengalí.
La coordinadora de Culturas, Género y Sexualidades de UNAF, Nerea Sancho, ha explicado que las campañas de sensibilización sobre violencia de género muestran realidades muy duras con las que las víctimas no quieren sentirse identificadas. Por eso, el objetivo de la nueva campaña es conectar con las violencias tal y como se explicitan en el día a día.
"A ti cuando te pasa algo y sufres violencia, ¿qué haces? Coges el teléfono y le mandas un audio a tu amiga. ¿Cuántas violencias explícitas aparecen en los whatsapps de las mujeres?. (...) Es clave la amiga que te dice 'pon límites, es violencia', yo te acompaño'", ha señalado.
Además de contener emocionalmente a la víctima y ayudarla nombrando la violencia sufrida (porque el entorno es fundamental para dar pasos), estas amigas de la campaña también les hablan de recursos específicos a los que pueden acudir para pedir ayuda, recursos a los que las mujeres migrantes y racializadas tienen dificultad para llegar por el idioma, la falta de información o incluso el miedo.
Hellen Namuli, mediadora intercultural de UNAF, ha subrayado que las víctimas migrantes desconocen sus derechos en muchas ocasiones y tienen miedo si se encuentran en una situación administrativa irregular, por lo que prefieren callar: "Las mujeres olvidan muchas veces que la vida es primero", ha dicho.
Samira Karmoun, también mediadora, ha incidido en que una de las problemáticas que tienen identificadas es que la información no llega a las víctimas migrantes y que las campañas institucionales, siempre en español, reflejan personas, historias e imágenes con las que no se sienten identificadas. EFE