Madrid, 25 nov (EFE).- Los fuertes vientos y las precipitaciones generalizadas aportadas este lunes por un frente frío asociado a la borrasca Bert dejarán paso a partir de mañana a una semana anticiclónica, con cielos más despejados y temperaturas incluso por encima de lo normal a estas alturas del año.
Así lo ha adelantado esta mañana el portavoz de la Agencia Estatal de Meteorología (AEMET), Rubén del Campo, quien ha confirmado las precipitaciones, rachas muy fuertes de viento y temporal marítimo que está dejando este frente, último latigazo de la borrasca que en los pasados días se ha situado sobre las islas británicas y que de hecho recibió su nombre del Met Éireann, el Servicio de Meteorología Irlandés.
Las lluvias a esta hora son generalizadas en la mayor parte de la península salvo en el área mediterránea, con especial abundancia en el Cantábrico, Pirineos, oeste de Castilla y León y norte de Extremadura y también han alcanzado a Canarias, en las islas de mayor relieve, aunque irán cesando a medida que vaya pasando el frente.
Los vientos están siendo también intensos, sobre todo en la mitad norte y especialmente en las montañas, donde las rachas pueden llegar a ser huracanadas -es decir, superar los 120 kilómetros por hora- pero, al igual que las precipitaciones, irán amainando a última hora de hoy
En cuanto a las temperaturas, empezarán a bajar una vez pase la nubosidad, "salvo en el área mediterránea, donde se rondará todavía los 25 grados", ha indicado Del Campo.
A esta hora, siete CCAA continúan en alerta de nivel amarillo, de riesgo, por lluvias, tormentas, viento y fenómenos atmosféricos según AEMET: Andalucía, Aragón, Asturias, Cantabria, Castilla-La Mancha, Cataluña y Galicia, si bien se espera que la mayoría de ellas pase a nivel verde, ya normalizado, a partir de las próximas horas.
"El panorama será bien distinto" a partir de mañana, según del Campo, ya que "predominará el tiempo estable, anticiclónico y sin apenas lluvias en lo que resta de semana" a excepción de "cuatro gotas que caigan en el norte", pero las lluvias serán sustituidas por bancos de niebla y de nubes bajas en amplias zonas del interior, de madrugada y por la mañana, lo que puede reducir la visibilidad y dificultar el tráfico en numerosos puntos de la red viaria.
Las temperaturas descenderán en buena parte del territorio nacional, con heladas en zonas de montaña y valores diurnos entre 10 y 15 grados en amplias zonas de la mitad norte y del centro peninsular y entre 15 y 20 grados en el sur y el área mediterránea, si bien en puntos del sureste podrían superar esos 20 grados ligeramente.
Miércoles y jueves traerán tiempo de nuevo estable con ausencia de lluvias prácticamente en toda España, "salvo quizás en puntos de Galicia y el Estrecho" donde, si las hay, serán precipitaciones débiles, pero de nuevo los bancos de niebla serán protagonistas y, además, las temperaturas subirán.
Aunque a primera hora de la mañana hará frío, con ciudades como León, Burgos, Palencia, Zamora o Valladolid rondando los cero grados, las temperaturas subirán y a primera hora de la tarde el ambiente será más templado y superará los 15 grados en buena parte del país y los 18 en el Cantábrico y Andalucía "e incluso se llegará hasta 22 o 24 grados en Murcia o Sevilla.
"En general el ambiente será claramente más cálido de lo normal, para encontrarnos ya a finales de noviembre", ha añadido Del Campo, con temperaturas diurnas entre 5 y 10 grados superiores a las habituales en esta época.
Con vistas al siguiente fin de semana, puente entre noviembre y diciembre, continuará el tiempo anticiclónico, en principio con temperaturas algo más bajas. EFE