Nueva Delhi, 21 nov (EFECOM).- Gautam Adani, fundador del conglomerado indio Adani Group, ha ganado notoriedad rápidamente y se ha convertido en una de las personas más ricas del mundo. Sin embargo, su rápido ascenso también ha estado acompañado de controversias y acusaciones de malas prácticas corporativas.
El magnate volvió a los titulares tras una acusación de la Justicia de Estados Unidos de orquestar una trama de sobornos a funcionarios indios y de defraudar a los inversores estadounidenses.
Según la acusación, el que una vez fue un modesto comerciante participó en un supuesto plan de sobornos de 250 millones de dólares para conseguir contratos de energía solar en la India. Esto incluyen tratos financieros ilegales para asegurar contratos gubernamentales, entre ellos el desarrollo de la que dice ser la planta de energía solar más grande de la India.
Adani ha sido foco de varias investigaciones y acusaciones de corrupción. Su peor momento fue en enero del año pasado cuando un informe del grupo inversor estadounidense Hindenburg Research acusó al multimillonario de llevar adelante un "esquema descarado de manipulación de acciones y fraude contable a lo largo de décadas".
Hindenburg aseguró a principios de 2023 que Adani agregó la mayor parte de su fortuna a través de la apreciación de las acciones en las siete empresas clave del grupo, que aumentaron un promedio del 819 % en menos de tres años.
La riqueza del multimillonario, que llegó hasta los 150.000 millones de dólares, ha experimentado un aumento meteórico, y lo hizo uno de los hombres más rico del mundo, surgiendo entre los primeros en el despegue de fortunas que vino con el enorme crecimiento económico de la India.
Este año la revista Hurun, considerada como la versión china de la Forbes, le dió a la India "el oro en las ‘Olimpiadas de la creación de riqueza’.
Al igual que el primer ministro indio, Narendra Modi, Adani proviene del estado occidental de Gujarat, lo que les llevó a cruzar sus caminos antes de que ambos llegaran a la cima.
El multimillonario comenzó a expresar simpatía por el líder nacionalista hindú y su formación, el Bharatiya Janata Party (BJP), desde que Modi era jefe de Gobierno en su estado natal y la fortuna de Adani era menos de una décima de la de hoy.
Sin interés por los estudios, Adani abandonó la escuela y las posibilidades de trabajar en el negocio de textiles de su padre para emprender sus propios negocios.
En 1988 fundó su primera empresa, lo que es hoy Adani Group, como una compañía de comercio que se expandió pronto a la importación y exportación de bienes, y más tarde al desarrollo de sus propios puertos.
Con la privatización de los puertos, y la llegada al poder de Modi de fondo, el ascenso de Adani se hizo imparable, con empresas de energías renovables, carbón, gas, infraestructura, y recientemente de prensa.
La adquisición en otra controvertida operación financiera del canal indio de televisión NDTV, considerado por los detractores de Modi como el último gran medio independiente del país, es visto como un favor de Adani para contener la crítica contra el primer ministro indio.
La mayoría de los periodista y presentadores críticos del Gobierno abandonaron la planta tras la operación. EFECOM