Madrid, 17 nov (EFE).- Las jóvenes Emma Carrasco y Laura Cabanes ejemplificaron el cambio de ciclo en la natación española tras encabezar el podio de los 200 estilos de los Campeonatos de España de piscina corta que concluyeron este domingo en Madrid y que certificaron la ausencia de Mireia Belmonte de los Mundiales de Budapest.
De nada le valió a Belmonte, la mejor nadadora española de todos los tiempos, mejorar en tres segundos su tiempo de las preliminares, ya que la de Badalona nunca estuvo en disposición ni de lograr la mínima, ni de discutir el triunfo a Carrasco y Cabanes.
Tal y como reflejó la cuarta plaza en la que la nadadora del CN. Barcelona tocó la pared tras firmar un tiempo de 2:13.47 minutos, más de tres segundos más que la mínima -2:10.16- requerida por la Federación Española para acudir a la capital magiar.
Más lejos quedó todavía Mireia Belmonte, campeona del mundo de la distancia en el ya lejano año 2010, de la ilerdense Emma Carrasco, primera con un crono de 2:09.19 minutos, y de la ciudadrealeña Laura Cabanes, segunda con una marca de 2:09.61, que sí lograron la mínima mundialista.
Cita universal en la que también estará Hugo González que no desaprovecho la ausencia de Carles Coll, que agotado renunció a participar en la final de los 200 estilos, para alzarse plácidamente con la victoria con un tiempo de 1:54.91 minutos.
Un crono que permitió al balear, que ya tenía segura su presencia el próximo mes de diciembre en Budapest, ratificar su billete para la capital húngara, tras rebajar en 34 centésimas la mínima -1:55.25- requerida por la Federación Española.
Registro que previsiblemente Hugo González hubiera tenido que rebajar más si hubiera contado en la final con la oposición del tarraconense Carles Coll, que concluyó primero en las series matinales con un tiempo 1:54.05 minutos.
Pero Coll, con la mínima mundialista ya asegurada y exhausto tras lograr cinco récords de España en cuatro días de competición, decidió renunciar a participar en la final, lo que no le impidió consagrarse como la máxima estrella de la competición.
Otro de los grandes triunfadores de estos Campeonatos de España ha sido, sin duda, el riojano Iván Martínez Sota, que tras lograr el jueves la mínima mundialista en los 50 espalda, sumó este domingo su segundo billete para Budapest tras imponerse en la final de los 100 espalda.
Martínez Sota, que se impuso con un tiempo de 51.29 segundos, rebajó por tan sólo una centésima la mínima -51.30- requerida para competir en el Duna Arena de la capital magiar, donde el riojano, de 19 años, debutará en una gran competición internacional absoluta.
Con más experiencia, pese a sus tan sólo 20 años, llegará a Budapest la ilicitana Ángela Martínez, olímpica el pasado verano en los Juegos de París en la modalidad de aguas abiertas, en las que nadará los 800 y los 1.500 libre.
Si el pasado viernes la nadadora del KZM logró la mínima en los 800, tras coronarse campeona de España con una marca de 8:27.11 minutos, este domingo completó el pleno tras lograr el billete en los 1.500 al imponerse en la final de los 1.500 con un tiempo de 16:08.13.
Marca que sirvió a Ángela Martínez para rebajar con claridad una mínima -16:15.27- que también mejoró la malagueña María de Valdés, vigente subcampeona del mundo de los 10 kilómetros en aguas abiertas, que fue segunda con un crono de 16:14.70 minutos.
Una corona que en las pruebas de velocidad recayó en la joven madrileña María Daza, de 17 años, que tras proclamarse el viernes campeona de España de los 50 libre se alzó este domingo con la victoria en la final de los 100 con un tiempo de 53.40 segundos.
Crono que permitió a Daza, que formó parte del relevo español de 4x200 libre que compitió el pasado verano en los Juegos Olímpicos de París, refrendar su presencia en los próximos Mundiales de Budapest tras volver a nadar por debajo de la mínima.
Si en las series matinales la nadadora del Canoe, que cerró la ronda preliminar con un crono de 53.67, rebajó en 11 centésimas el tiempo -53.78- requerido para acudir a la capital magiar, en la final de la tarde María Daza nadó 38 centésimas por debajo de la mínima.EFE