Madrid, 15 nov (EFE).- El gallego Miguel Martínez Novoa, que revalidó el titulo de campeón de España de los 200 mariposa tras una espectacular final en la que tuvo que batir el récord de España para alzarse con la victoria, se convirtió en el gran protagonista de los Nacionales de piscina corta que se disputan en Madrid.
Un estrellato que tan sólo se atrevió a discutir el tarraconense Carles Coll, que se confirmó como el indiscutible 'rey' de la braza, tras establecer dos récords de España de una tacada, el de los 50 y el de los 100, en la final del hectómetro.
Pero si Coll apenas encontró resistencia en el joven Nil Cadevall, al que aventajó en más de un segundo, Miguel Martínez Novoa protagonizó una feroz batalla con el asturiano Arbidel González, que obligó al gallego a establecer un nuevo récord de España -1:51.97- para alzarse con la victoria.
La tercera plusmarca nacional de la distancia que se fijó este viernes en la piscina M-86 de la capital de España, donde Martínez Novoa y González, que se aseguraron su presencia en los Mundiales de Budapest, se fueron arrebatando el récord uno a otro.
El primero en golpear fue Miguel Martínez Novoa, que dejó obsoleta la plusmarca nacional que él mismo poseía desde el pasado año con un tiempo de 1:52.88 minutos, tras ganar su serie con un crono de 1:52.63.
Poco le duró la alegría al vigués porque apenas dos minutos después el asturiano Arbidel González le arrebató su nuevo récord de España tras firmar un registro de 1:52.07.
Todo un golpe del que Miguel Martínez se tomo la revancha en la final de la tarde, en la que el nadador del Canoe, que dominó de principio a fin la prueba, se alzó con la victoria tras establecer un nuevo tope nacional con un registro de 1:51.97 minutos.
Un récord de España que también logró, y por partida doble, el tarraconense Carles Coll, que batió este viernes dos plusmarcas de una tacada, la de los 50 y la de los 100 braza, en la final del héctometro.
Coll, que ya en las eliminatorias de la mañana había establecido una nueva plusmarca nacional con un tiempo de 57.75 segundos, volvió a demostrar en la final de la tarde su condición como mejor bracista español del momento tras nadar en 57.17.
Pero en su camino hacia la corona de campeón de España, el catalán, que se entrena en Estados Unidos a las órdenes de Sergi López en la universidad de Virginia Tech, no sólo batió el récord de España de los 100, sino también el de los 50.
Carles Coll, que completó los dos primeros largos de la final en un tiempo de 26.53 segundos, rebajó en 8 centésimas la plusmarca nacional de los 50 braza que poseía Bruno Ortiz-Cañavate con un crono de 26.61 desde los Europeos de Glasgow 2019.
Una sensacional actuación que permitió al nadador del CN Sabadell, de 23 años, sellar su segundo billete para los Mundiales de Budapest, tras el logrado el jueves en los 200 braza.
Cita en la que también estará la ilicitana Ángela Martínez, que logró una plaza en el equipo mundialista, tras imponerse en la final de los 800 libre con una marca de 8:27.11 minutos.
Un tiempo que permitió a la nadadora de KZM, que nadó en los pasados Juegos Olímpicos de París la prueba de aguas abiertas, rebajar en más de dos segundos la mínima -8:29.17- requerida por la Federación Española para competir el próximo mes de diciembre en el Duna Arena.
Mundiales para los que Mireia Belmonte, la mejor nadadora española de todos los tiempos, deberá seguir esperando para lograr una plaza, tras concluir quinta en al final de los 400 estilos.
Belmonte, que firmó un tiempo de 4:44.34 minutos, casi siete segundos más que la marca -4:37.54- exigida para acudir a la capital magiar, nunca estuvo en disposición de discutir la victoria a las jóvenes Emma Carrasco y Laura Cabanes.
Tal y como atestiguaron los once segundos en los que Carrasco, que se impuso con un cromo de 4:33.28, aventajó a la nadadora de Badalona, que cumplió 34 años el pasado domingo.
Igualmente lejos quedó Mireia Belmonte, que todavía mantiene vigente el récord del mundo que estableció en el año 2017 con un registro de 4:18.94, de Laura Cabanes, segunda con una marca de 4:36.11.
Un tiempo que permitió a Cabanes, bronce en los Europeos júnior disputados e pasado verano en Vilna, lograr el pasaporte para Budapest, donde Emma Carrasco ya tenía asegurada su presencia en los 200 y 400 estilos. EFE