Málaga, 15 nov (EFE).- El técnico del Unicaja, Ibon Navarro, ha afirmado sobre la situación de su equipo, líder de la Liga Endesa con quince victorias y una derrota, que estén "todavía" acordándose de la derrota ante el Baxi Manresa por cuarenta puntos "es bueno" porque tienen "las expectativas muy ajustadas".
"La situación en la que se encuentra el Andorra ahora le quita potencial, no hay duda", dijo en rueda de prensa Navarro sobre el Morabanc, ante el que afrontan el partido "de una forma menos tensa" aunque, pese a las bajas, es muy peligroso porque "va a haber muchos jugadores que van a dar un paso adelante, que van a jugar sin ningún tipo de presión".
Consideró que "tienen mucho talento con Okoye, Hardin, Kuric y la vuelta de Shannon Evans", y que cometerían "un error al pensar que no tienen opciones por las lesiones de Rafa Luz y Ferrán Bassas, que son dos jugadores muy importantes, no sólo para ellos, sino para cualquier equipo, aunque más para ellos por su estilo de juego".
Otro jugador del equipo andorrano que será baja por lesión es el pívot estadounidense Ben Lammers, "el jugador con más tapones de la ACB y les condiciona, pero ahora toca hacer ver al equipo la parte mala: van a dar un paso adelante actores secundarios y eso tenemos que intentar controlar", indicó.
El Unicaja tiene algún jugador con dolencias como el pívot estadounidense David Kravish, que "tiene un pequeño problema en la espalda, va a entrenar" y, a partir de ahí, tomarán "alguna decisión: nos gustaría que estuviese el domingo, pero si no está bien hay dos compañeros en su posición", afirmó. EFE
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