Inmaculada Tapia
Madrid, 15 nov (EFE).- El flamenco ha dejado de estar vinculado al sur de España, su epicentro no lo ocupa una ciudad, es global, se ha convertido en "fenómeno mundial", según explican a EFE artistas como Jesús Carmona, Juan Requena, Mercedes de Córdoba o Eduardo Guerrero, que hablan del "esplendor" de un género que este sábado conmemora su Día Internacional.
"El flamenco está en un momento de esplendor, en una época en la que convive la tradición con la vanguardia", explica a EFE el bailaor y coreógrafo Juan Carmona, Premio Nacional de Danza 2020.
Una idea a la que se suman la bailaora y coreógrafa Mercedes de Córdoba, quien destaca que las mujeres "como creadoras están viviendo una etapa brillante"; el bailaor Eduardo Guerrero añade que "estamos ante una generación de mucho talento que lleva la danza a lugares especiales".
Juan Manuel del Rey, presidente de la Asociación de Tablaos Flamencos y gerente del histórico Corral de la Morería, asegura que el flamenco está cada vez más valorado por el "ciudadano de a pie", el que se acerca al género de una manera casual y ya no se aparta.
"Hay un flamenco para todos los públicos", confirma Carmona, que considera que antes estaba más valorado el cante que el baile, y ahora ambos se encuentran al mismo nivel.
Tanto Del Rey como Emma Mateos, directora de marketing y comunicación de la empresa de creación y producción de espectáculos So-La-Na, coinciden en que el flamenco se ha convertido en un "fenómeno global y multidimensional", que crece y se reinventa con la fusión con otros géneros como el jazz, el rock o la música electrónica, lo que permite que se acerque a otras audiencias.
Para Mateos, "el flamenco ha dejado de ser un fenómeno exclusivo de España". Grandes ciudades como Nueva York, Londres, París o Buenos Aires se han convertido en importantes núcleos del baile y del cante, gracias a las giras y a las plataformas digitales.
Aunque Andalucía sigue siendo el corazón cultural del flamenco, festivales como los de Ponferrada, Madrid, Castellón, Murcia, Barcelona o Pamplona demuestran el gusto y el interés por este arte.
El guitarrista flamenco Juan Requena ha matizado que este género está en "un buen momento, siempre que sepamos diferenciar lo que es flamenco de lo que no lo es. Se programan muchas cosas que no son flamenco".
Por otro lado, la bailaora cordobesa asegura que los artistas deben sentirse libres para expresarse, "purismo o vanguardia, con que a alguien le conmueva ya es maravilloso. Hay público para todos los gustos, y eso es lo maravilloso; esa variedad con respeto".
En España, Del Rey apunta que Madrid se ha convertido en referencia del sector al haber declarado el flamenco Bien de Interés Cultural (BIC) de la región y haber constituido una compañía de Ballet Español. "Denota el interés institucional".
Algo en lo que incide De Córdoba, que considera que Madrid es la ciudad en la que más flamenco se programa. "No estamos para nada respaldados. El flamenco se debería programar más en los teatros", en esa línea Guerrero reivindica un teatro para la danza en cada ciudad.
Sin embargo, para el presidente de los tablaos este espacio "ha sido, es y seguirá siendo el principal laboratorio de creación y evolución del flamenco", además de dar trabajo a más del 90 por ciento de los artistas, y es en él donde se unen para compartir conocimientos, asegura.
"Es universidad, doctorado, I+D+I, la punta de lanza de la creación, donde está más vivo y libre y sintoniza más con su esencia", añade.
Guerrero insiste en que es un arte en "continua evolución, no para de crecer", y recuerda que fue en un tablao donde comenzó a aplicar una visión "más vanguardista" a su danza, "todo suma y no por ello el flamenco pierde su esencia", asegura este coreógrafo, calificado por la crítica como "el nombre del nuevo flamenco".
El guitarrista Requena asegura que hay mucha demanda de flamenco, una razón por la que cree que "la calidad artística es difícil de mantener".
Los tablaos "son espacios donde el espectáculo se enfoca para el público extranjero -continúa el guitarrista- creyendo que no tienen información ninguna sobre el flamenco. Creo que es un error".
A pesar de ello, Mateos defiende que el tablao permite que el flamenco sea "más accesible y visible", su proliferación tiene aspectos positivos, pero también advierte de los desafíos que afronta en relación con la preservación de la tradición y el bienestar de los artistas.
"Cada artista ha ido encontrando su propia identidad, a la hora de presentar sus espectáculos, sin perder la magia", dice Carmona.
Pero ante tanta demanda "no todo vale", concluye De Córdoba. EFE
(Recursos de archivo en www.lafototeca.com en la URL http://bit.ly/1i59vVw)