Confirman 14 años de cárcel para un padre que abusó sexualmente de su hija en Pontevedra

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Pontevedra, 15 nov (EFE).- El Tribunal Superior de Xustiza de Galicia (TSXG) ha confirmado los 14 años de cárcel impuestos a un hombre que, durante casi dos años, abusó sexualmente de su hija, una menor que cuando comenzaron estos episodios tenía 14 años.

La sala de lo Civil y Penal del alto tribunal gallego no ha modificado la sentencia previa de la Audiencia de Pontevedra, que el progenitor de la menor recurrió al entender, entre otras consideraciones, que se había vulnerado con él la presunción de inocencia.

Pero los magistrados del TSXG consideran probado que el acusado, desde que su hija tenía 14 años, empezó a darle besos con lengua, "diciéndole que era normal en la familia darse besos así pero que no se lo contara a nadie", para días después comenzar a tocarle los pechos.

Este comportamiento se volvió cada vez más repetitivo hasta que llegó a ser diario.

En los periodos en los que estaba embarcado, comenzó a solicitarle a su hija fotos y videos con ropa ajustada, con ropa interior y desnuda, a lo que ésta solía acceder bajo amenazas.

Si la menor no atendía a su demanda se enfadaba o la castigaba, "llegando incluso a decirle que le levantaba el castigo si cuando él silbara ella se desnudaba o le enviaba un video desnudándose o duchándose", relata la sentencia.

Cuando la menor cumplió los 15 años, su padre comenzó a acostarse en la cama con ella "pidiéndole que se pusiera algún camisón determinado o que estuviera desnuda" y en una de estas ocasiones la agredió sexualmente penetrándola con los dedos.

Este comportamiento cesó cuando la menor le contó a su madre y a su tía lo que estaba pasando, momento en el que presentaron denuncia contra el acusado.

El padre de la víctima ha sido condenado a doce años de prisión por un delito de abuso sexual y a otros dos años por un delito de embaucamiento sexual, así como diez años de libertad vigilada, a contar desde que salga de la cárcel, por cada uno de los dos delitos.

El acusado no podrá además acercarse a menos de 200 metros ni comunicarse con su hija durante diez años más de la pena impuesta, es decir 24 años, tendrá que indemnizarla con 30.000 euros y quedará inhabilitado para trabajar con menores. EFE

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