Madrid, 14 nov (EFE).- Javier Sánchez Fuentefría, quien fuera director general de organización e inspección del Ministerio de Transportes en 2020, ha declarado este jueves en la comisión del Senado sobre el caso Koldo que la compra de 8 millones de mascarillas que es investigada correspondía con los cálculos de la necesidad que tenían para un mes.
Según ha explicado el ex alto cargo de Transportes, quien en la investigación judicial ha declarado como testigo, su papel entonces consistió en preguntar a cada entidad dependiente del ministerio cuántas mascarillas requerían, lo que fue anotando en un 'excel', y el resultado fue de casi 4 millones para 15 días y de casi 8 millones para un mes.
Por ello, no le extrañó nada y le pareció "una cifra razonable" que la decisión que vio en una orden ministerial fuera comprar 8 millones, si las condiciones ofertadas eran óptimas.
Así se lo ha respondido a los senadores Ángel Pelayo Gordillo, de Vox, y Rocío Dívar, del PP, quienes le han preguntado especialmente sobre si le sorprendió que se aumentara de 4 a 8 millones la cantidad a comprar, en una decisión que se cambió 38 minutos después, según figura en sendos correos electrónicos.
La senadora del PP ha hecho hincapié continuamente durante su interrogatorio en sostener que la declaración de Sánchez Fuentefría solo aporta datos interesantes sobre una de las operaciones de la presunta trama de corrupción, porque él fue testigo y "ni es investigado ni lo va a ser".
La compra de las mascarillas fue encargada a Puertos del Estado y él advirtió al entonces subsecretario de Transportes, Jesús Manuel Gómez, de quien dependía jerárquicamente, sobre varias "cautelas" a tener en cuenta, de cómo tenía que hacerse la factura o de comprobaciones necesarias para mejorar la contratación.
Unas cautelas que trasladó por su experiencia en el Ministerio de Hacienda -al que ha vuelto tras su paso por Transportes-, pese a conocer que no eran exigidas por la ley en las circunstancias de la pandemia.
El ex director general ha indicado que en ningún momento consideró que se hiciera algo irregular y que si lo hubiera visto lo hubiera puesto en conocimiento de la fiscalía, como ha hecho en otras ocasiones en su trayectoria profesional, en la que ha trabajado en equipos de lucha contra la corrupción.
Sánchez Fuentefría ha asegurado que dejó de leer las noticias en prensa sobre el caso Koldo después de ver algunas "barbaridades" que no tenían sentido, al sacar de contexto "trozos de un informe".
Asimismo, ha preferido no opinar sobre la auditoría hecha en el Ministerio de Transportes este año sobre lo actuado cuatro años antes, pero ante la insistencia en las preguntas de Dívar sobre esa auditoría, ha desgranado que aprecia varias incorrecciones. EFE