Madrid, 14 nov (EFE).- Chus Mateo, entrenador del Real Madrid, lamentó la derrota sufrida por su equipo en casa en la Euroliga ante el Anadolu Efes turco (64-74) y consideró que deben "afrontar todos los partidos respetando más a los rivales", lo cual les penalizó en la primera parte.
"El resumen del partido es claro. Hemos empezado con la mentalidad errónea, yendo a lo más fácil, que era jugar en el perímetro de nuestro ataque. Hemos respetado poco a un rival que venía haciéndolo muy bien fuera de casa. Conceder demasiadas licencias en la primera parte ha sido la clave. Hemos perdido diez balones, hemos tomado más tiros de fuera que buscar a los interiores en la pintura", dijo.
"Eso ha sido clave para que al final no pudiéramos llegar cuando hemos querido y cuando hemos demostrado el orgullo de querer defender y estar bien colocados. Hemos empezado tarde; era complicado después de estar veintitrés abajo volver al partido. Tenemos que afrontar todos los partidos respetando más. Ya nos ha pasado en dos o tres ocasiones dar demasiada ventaja al contrario y es algo que tenemos que saber que no puede pasar", opinó.
Pese a ello resaltó el orgullo con que trataron de volver al partido, aunque "eso no siempre es suficiente": "Hemos concedido muchas facilidades al Efes para que tomara una gran ventaja desde el primer cuarto y ese orgullo de después, ese carácter, ha sido suficiente como para acercarnos a falta de cuatro minutos, pero no para ganar el partido".
"Cuando vas remando tanto tiempo ante un equipo como el Efes, si llegas igualado al final puede pasar cualquier cosa. Teníamos que haber afrontado la primera parte con una mentalidad parecida a esa con la que hemos salido del vestuario", agregó ante los medios.
Asimismo detalló como fue su charla en el descanso: "He dicho que creía que estábamos haciendo muy mal partido de inicio, con muy poca mentalidad, con muy poca dureza. Y que estábamos viendo cómo nos estaban anticipando, sacándonos de la pintura, que no estábamos siendo agresivos ni adelante ni atrás. Era tan evidente y tan obvio que el propio orgullo de los jugadores ha hecho que saliéramos a anticipar y a hacer las cosas mejor en la segunda parte". EFE