Salamanca, 9 nov (EFE).- El conocido como 'El eterno maletilla', Conrado Abad, ha muerto este sábado a los 98 años en Ciudad Rodrigo (Salamanca), donde pasó los últimos años de su vida ya sin torear en sus míticas capeas, pero sin cortarse la coleta que le hacía ser uno más entre los maestros de la tauromaquia que acudían al Carnaval del Toro mirobrigense.
Conrado pasó los últimos días ingresado en el Hospital Clínico Universitario de Salamanca, aquejado de una neumonía motivada por el covid, pero ayer regresó a la residencia donde ha fallecido hoy, según han explicado a EFE fuentes de este centro residencial dependiente de la Diputación de Salamanca.
Fue precisamente en plena pandemia cuando ingresó en la residencia, pero no por un contagio sino por una caída que le fracturó la cadera y que también le llevó al hospital.
Hacía ya más de diez años que no pisaba el albero, después del último susto en el municipio cacereño de Torrejoncillo, donde a sus 82 años un toro le causó graves heridas y en la práctica le retiró.
No obstante, su vida siempre giró en torno a los toros, las capeas y las fiestas populares, con una particular filosofía y con la ilusión de los más jóvenes maletillas aún en su mirada.
Los homenajes se han sucedido en los últimos años, especialmente en el municipio de Ciudad Rodrigo, vinculados a su tradicional Bolsín Taurino y su Carnaval del Toro, ya que era un fijo de las capeas en la plaza rectangular característica de estos festejos.EFE