El presidente del Gobierno de Canarias, Fernando Clavijo, ha vuelto a pedir este sábado al Gobierno central que no se "olvide" de la crisis migratoria que padecen las islas desde hace más de un año y se enfoque en buscar soluciones tras el "shock" de la DANA en Valencia.
"Aquí seguimos con la emergencia", ha detallado a los periodistas tras participar en una de las rutas rurales que propone el Gobierno en Gáldar, subrayando que "no puede ser" que esto "pase un segundo plano".
"No nos lo merecemos. Ni las personas que buscan llegar a una esperanza, a un futuro mejor, ni desde luego el pueblo canario que estamos soportando en solitario toda esta presión", ha indicado.
Clavijo ha señalado que siguen "llegando personas" a las costas del archipiélago "y el pueblo canario está dando un ejemplo de solidaridad, de ejemplaridad y desde luego de civismo" y entiende que el Gobierno de España "es lo suficientemente grande", con ministerios, funcionarios y departamentos "como para poder atender las dos emergencias".
El presidente no ha obviado que la DANA ha sido una "desgracia tremenda" pero ha remarcado que Canarias vive su propia "desgracia" con más de un centenar de fallecidos y desaparecidos en la ruta migratoria en las últimas semanas.
Sobre las responsabilidades políticas en la gestión de la DANA ha comentado que su Gobierno no va a "entrar" en ese análisis porque la emergencia que "todavía continúa y hay municipios sin agua, sin luz y todavía se están buscando a desaparecidos".
Así ha dicho que ahora lo que toca es "trabajar y estar todos juntos", y en ese sentido se ha mostrado "orgulloso" del destacamento que ha enviado su Gobierno para participar en las labores de reconstrucción y aportar su "granito de arena".
"Desgraciadamente habrá mucho tiempo para poder hacer valoraciones de esa índole, pero en las emergencias hay que cerrar filas, en las emergencias no te puedes replantear el procedimiento, y eso quizás es lo que realmente desde Canarias siempre hemos practicado", ha destacado.
Clavijo ha defendido también el "modo canario" de hacer política en la gestión de las emergencias basada en la "unidad, transparencia y sobre todo pensar en el ciudadano".