David Ramiro
Redacción deportes, 8 nov (EFE).- Un trineo de 200 kilos con el que deslizarse a 140 kilómetros por hora es la herramienta de trabajo de Leanna García, la prometedora esperanza española del bobsleigh, un deporte minoritario que maneja cifras muy elevadas para su práctica como los 2.000 euros por unas cuchillas o los 20.000 por un trineo individual en propiedad.
Leanna García hará historia el 22 de noviembre cuando se convierta en la primera mujer española en competir de manera oficial en la disciplina individual del bobsleigh, el monobob, en la Copa América que se disputa en el trazado canadiense del Whistler Sliding Centre, el considerado circuito más peligroso del mundo.
La piloto, de 29 años y nacida en Ottawa, cuenta con la nacionalidad española desde julio de este 2024, ya que su padre y familia paterna son de España. Ella se ha convertido en la gran esperanza de un deporte poco arraigado en España y que, a nivel internacional, cuenta con 52 mujeres en el circuito.
"Llevamos un año trabajando algunos aspectos y una vez ha tenido el pasaporte hemos puesto la maquinaria en marcha. Ha sido una odisea en muchos sentidos pero estoy con ilusión y ganas porque sé que en esta primera competición lo puede hacer bien y puede ser una buena tarjeta de presentación para que la gente vea que el proyecto va en serio", declara a EFE Ander Mirambell, director deportivo de la Real Federación Española de Deportes de Hielo y leyenda del skeleton nacional con cuatro participaciones olímpicas.
Mirambell no conocía a Leanna hace trece meses. Tenían amigos en común, uno de ellos le explicó su historia, le dio su contacto y le escribió por Instagram. Esa relación empezó en octubre de 2023. "Su historia me impactó bastante porque lo primero que me pidió fue disculpas porque su español no era bueno pero me dijo que quería aprenderlo bien y competir como española".
"Busqué quién era, miré referencias, vi que tenía buen empuje y analizamos en la federación su caso porque no estamos para regalar nacionalidades a nadie aunque su historia era bastante tierna. Viajaba de vez en cuando a Madrid a conocer la familia y su historia me gustó. Tiene sangre española y lo único que tiene que hacer es mejorar el idioma. Me impactó su energía y sus ganas y prueba de ello es que ha dejado parte de su trabajo para invertir su dinero en el proyecto de bobsleigh", confiesa.
El objetivo a corto plazo es doble. Por un lado clasificarse para el Campeonato del Mundo, en marzo de 2025, y por otro que aprenda los circuitos para poder clasificarse después para los Juegos Olímpicos de invierno de 2026.
"Cuando la conocí no lo estaba pasando bien, no era feliz, y recuperarla como persona ha sido uno de los grandes éxitos de esta temporada porque un deportista que es feliz rinde el doble. Al principio la he ayudado con contactos, buscando entrenadores, temas de logística y ahora que pertenece a la federación hemos creado un proyecto conjuntamente. Va a ser duro, intenso, pero estoy con ganas de verla volar en el trineo", apunta.
El elevado coste del trineo es lo que frena que haya más deportistas practicándolo ya que uno individual puede costar alrededor de 20 o 25.000 euros y uno para cuatro, en el mercado de segunda mano, pueda alcanzar los 90.000. Aparte de eso están las cuchillas, que cuestan 2.000 euros, y el peso, que ronda los 200 kilos y, por tanto, necesita de varias personas para moverlo y su coste de transporte también se multiplica.
"Con el objetivo de reducir costes la federación internacional ha sacado un proyecto por el cual el trineo para toda la temporada se puede alquilar por ocho o nueve mil euros. Es una promoción buscando esa idea de acercar el bobsleigh a todo el mundo. Ahora hay una docena de trineos a disponibilidad de los países. Ese precio, si lo divides entre seis o siete meses, se vuelve más real", admite.
La Federación Internacional de Skeleton & Bobsleigh (IBSF), de la que Ander Mirambell es vicepresidente de Deportes, ha conseguido que esta temporada, por primera vez, haya trineos en Estados Unidos y Europa, de tal forma que no haya que viajar con él y se encarezca el proceso.
"Comprar un trineo no es un objetivo para la federación española porque a día de hoy, en la disciplina de monobob, se puede competir con uno estándar. Tener uno propio con tus propios mecánicos sería lo suyo pero para llegar a los Juegos, a día de hoy, creemos que puede ser suficiente", señala.
Leanna, en su etapa anterior con el equipo canadiense, compitió en la modalidad de bobsleigh a dos deportistas, donde ella ocupaba la posición de frenadora, la encargada de empujar desde atrás el trineo en la salida. En los últimos años ha acumulado experiencia en competiciones como la Copa América y la Copa de Europa y ahora, con España, está dentro del llamado Proyecto Asiático.
Es un equipo compuesto por deportistas de países como Tailandia o Túnez en el que se ha metido España. La federación alquila un trineo y a ella le dan entrenador más mecánicos. Está dentro de esa asociación de países asiáticos de desarrollo en la gira americana y cuando regrese a Europa estará con el entrenador de la federación internacional o con uno neerlandés porque va a compartir gastos con una chica de allí.
"Estoy muy emocionada de poder representar a España a partir de esta temporada y, ojalá, cumplir mi sueño de alcanzar los Juegos Olímpicos de Invierno de 2026. Para mí es un orgullo ser la primera mujer española en competir en monobob. Quiero crear un camino para que más mujeres se unan a esta disciplina en el futuro. Mi experiencia hasta ahora ha sido como frenadora dentro del trineo de dos personas, por lo que pilotar yo sola es un reto muy especial y que requiere ser muy precisa, ya que llegamos a alcanzar velocidades de hasta 140 km/h”, declara Leanna.
A Mirambell se le nota ilusionado con este nuevo proyecto que dirige en la Real Federación Española de Deportes de Hielo. Con el bobsleigh hay muchas esperanzas pero también con el skeleton. De hecho, estos días está en Corea del Sur con Ana Torres Quevedo, Clara Aznar y Adrián Rodríguez, los tres deportistas con los que aspira también llegar al Mundial en 2025 y que salieron de un grupo de más de cuarenta aspirantes.
Todo ese proceso se puede ver en el documental 'Skeleton's Serious Kids', la película documental que se estrena este mes y que comienza con la propia retirada de Ander Mirambell en los Juegos de Pekín 2022. Atrás dejó cuatro participaciones olímpicas (Vancouver 2010, Sochi 2014, PyeongChang 2018 y Pekín 2022), más de 180 carreras, 92 de ellas en la Copa del Mundo, y un doble título en la Copa América.
El objetivo es claro. Llegar a los Mundiales de 2025 con tres deportistas clasificados en skeleton y uno en bobsleigh. "Sería un sueño y para ello trabajamos", confiesa. EFE