El Gobierno tunecino anuncia la construcción de 5.000 viviendas sociales en 2025

El primer ministro Kamel Madouri detalla un plan para 2025 que incluye la edificación de 5.000 viviendas sociales, renovaciones habitacionales y reformas fiscales en el contexto de la sostenibilidad económica de Túnez

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Túnez, 8 nov (EFECOM).- El Gobierno tunecino aprobó la construcción de 5.000 viviendas sociales en el país de cara a 2025, así como el derribo de 1.300 que se encuentran en mal estado, con el fin de renovar el parque habitacional y elaborar un nuevo texto legislativo sobre la propiedad estatal, anunció este viernes el primer ministro, Kamel Madouri.

El responsable reveló su estrategia durante la sesión general de los miembros del Parlamento y de la nueva cámara, el Consejo Nacional de Regiones y Distritos (CNRD), que iniciaron hoy el debate sobre los presupuestos generales del Estado.

El texto presentado estima un total de 78.000 millones de dinares (23.300 millones de euros), lo que supone un aumento de 2.500 millones de dinares (750 millones de euros) con respecto al ejercicio actual. Además prevé un aumento de los ingresos del 5,7% y un ligero incremento de los gastos del 0,04%.

El gabinete de Madouri busca reforzar los recursos propios- que representan el 64% del total- gracias al desarrollo y la digitalización de la administración y aseguró basarse en la estabilización del crecimiento del PIB, situado actualmente en el 3,2%, y del precio del barril de Brent en 74 dólares.

Otro de los ejes principales de la estrategia nacional será la reforma fiscal con el fin de ampliar la base impositiva e integrar la economía informal al tiempo que combate la evasión fiscal y la racionalización de los ingresos públicos.

El objetivo principal, insistió, es reforzar el "papel social" del Estado para seguir subvencionando los productos básicos, hidrocarburos y transportes y favorecer así a las categorías más desfavorecidas, especialmente a través del futuro Fondo de Seguro contra la pérdida del empleo para los trabajadores despedidos por razones económicas.

El país magrebí arrastra una deuda pública del 82% del PIB, con préstamos exteriores que alcanzan los 2.700 millones de euros y que el Gobierno pretende reembolsar a través de bonos del Estado financiados "excepcionalmente" por el Banco Central sin intereses y con la posibilidad de reembolsar en diez años.

Después de alcanzar un acuerdo con el Fondo Monetario Internacional (FMI) dos años antes para un crédito de 1.900 millones de dólares, el presidente Kais Said- que se arrogó plenos poderes en 2021 "para preservar la paz social"- lo rechazó por temor a protestas sociales ante medidas impopulares como la retirada de subvenciones, privatización de empresas públicas o limitar el número de funcionarios.EFECOM

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