Barcelona, 6 nov (EFE).- Los agentes de los Mossos d'Esquadra que neutralizaron en 2021 a Eugen Sabau, conocido como el 'pistolero de Tarragona', han alegado hoy ante el juez que les investiga por su actuación que dispararon en defensa propia y que vieron peligrar su vida porque éste les tendió una trampa desde su trinchera.
Según han informado a EFE fuentes judiciales, ante el titular del juzgado de instrucción número 1 de Reus (Tarragona) han comparecido este miércoles cinco de los once agentes del Grupo Especial de Intervención (GEI) de los Mossos investigados por su actuación en diciembre de 2021, cuando neutralizaron al 'pistolero de Tarragona', que hirió con arma de fuego a tres excompañeros de trabajo y a un agente.
Los primeros cinco mossos investigados que han comparecido hoy ante el juez -mañana lo harán los otros seis-, han asegurado que actuaron en defensa propia mientras las balas que disparaba Sabau contra los policías que trataban de detenerle pasaban cerca de su cabeza, por lo que temieron por su vida.
Los agentes, que han insistido en que su intervención fue correcta y proporcional, han explicado al juez la dificultad de la operación, ya que Sabau se había atrincherado armado en posición de combate y con una "clara superioridad", ya que estaba escondido y apenas podían saber dónde se encontraba, en una masía aislada en Riudoms (Tarragona).
Los Mossos investigados se acercaron por detrás a la zona en la que estaba atrincherado Sabau -que quedó malherido al ser neutralizado y meses después un juez autorizó su petición para recibir la eutanasia-, con la intención de detenerle.
Sin embargo, pese a que gritaron "alto, policía", el pistolero empezó a disparar ráfagas con una arma de fuego, ante lo que dos de los mossos investigados repelieron el ataque también utilizando sus armas de fuego reglamentarias como mecanismo de protección para poderse refugiar, según han relatado al juez.
Sabau se quedó sin munición, cambió de arma y empezó a disparar de nuevo, momento en que un tercer agente le pudo neutralizar, según los investigados.
Los Mossos investigados han insistido en que actuaron para defenderse, que fue Sabau quien abrió fuego, que todo pasó muy deprisa y que apenas pudieron apuntar al disparar para refugiarse porque estaban en movimiento y las balas les pasaban por encima, muy cerca de la cabeza.
Además, han explicado al juez que pudieron salvar su vida gracias a su formación y experiencia en el grupo de operaciones especiales, ya que están convencidos de que agentes de seguridad ciudadana, por ejemplo, habrían caído en la trampa que el pistolero les había tendido cuando se atrincheró en la masía.
El juez acordó investigar a estos once agentes a raíz de una querella interpuesta por la hermana de Sabau, que consideró desproporcionada su actuación, ya que provocó a su hermano una tetraplejía y secuelas graves por las que finalmente se le aplicó la eutanasia.
Eugen Sabau se dirigió el 14 de diciembre de 2021 a las oficinas de Securitas en Tarragona, empresa de la que había sido despedido poco antes, donde disparó contra tres de sus excompañeros de trabajo y luego huyó, por lo que se inició una persecución policial en la que también resultó herido de un disparo un agente de la policía catalana cuando trataba de detenerlo en una rotonda en Reus (Tarragona). EFE