Huelva, 31 oct (EFE).- La red Gas No Es Solución, una plataforma que reúne a diversas organizaciones de la sociedad civil, ha defendido desde Huelva la necesidad de salir cuanto antes de la dependencia del gas, dado su impacto, y ha criticado las falsas soluciones en la transición energética.
Así lo ha manifestado durante el encuentro anual de la red, celebrado en Huelva, un lugar escogido como sede debido a la significativa presencia de infraestructuras vinculadas a la importación y consumo de gas fósil.
La ciudad, ha informado la organización en un comunicado, alberga importantes instalaciones que abastecen sectores clave como la industria petroquímica, metalúrgica, de generación eléctrica y de fertilizantes.
Entre las infraestructuras más relevantes para el trabajo de la red se encuentra la regasificadora de Huelva, una de las principales terminales de Gas Natural Licuado (GNL) del país.
Una instalación que no ha superado el 27 % de utilización en el primer cuatrimestre de 2024, lo que no ha impedido a sus propietarias plantear una nueva ampliación de las instalaciones y el puerto que permitirían la llegada de barcos metaneros de mayor tamaño.
La red ha señalado que, estudios recientes, como el del Instituto de Economía Energética y Análisis Financiero (IEEFA), advierten que más de la mitad de la capacidad europea de importación de GNL podría quedar inservible para 2030, debido a la reducción proyectada en la demanda de gas.
Además del gas fósil, Huelva está en el punto de mira de grandes proyectos de producción de hidrógeno verde. Esto podría generar una expansión del suelo industrial, lo que plantearía conflictos por el uso del suelo y del agua en una región que ya sufre los efectos de la sequía.
Unos retos de descarbonización que fueron tratados en el espacio la Enredadera en una mesa redonda donde se abordaron por expertos de la Red y de Ecologistas en Acción de Huelva las situaciones paradójicas y de evolución del sector gasista y petrolero.
Sergio Bonati, técnico de Clima y Energía en WWF España, ha defendido que “necesitamos salir de la dependencia del gas lo antes posible y transicionar a un futuro de energía renovable y distributiva con soberanía, igualdad y justicia social”.
Del mismo modo, el investigador Massimiliano Patierno, del Instituto Internacional de Derecho y Medio Ambiente, ha señalado que “el hidrógeno verde todavía es una tecnología en fase de desarrollo y no se puede pretender generalizar su uso y decir que es la solución para la descarbonización de todos los sectores”.
También, Marina Gros, coordinadora del Área de Energía y Clima de Ecologistas en Acción, ha dicho al respecto que “el gas que recoge la regasificadora proviene de otras partes del mundo, el 90 % de los combustibles fósiles que se utilizan en Europa son importados desde el exterior acarreando impactos importantes en las comunidades extractoras”. EFE
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