Madrid, 30 oct (EFE).- Nuevas tormentas sacudirán un día más al país y agravarán el desastre de las inundaciones y desbordamientos de ríos de las últimas horas por lluvias torrenciales especialmente en la Comunidad Valenciana, a causa de una dana, la peor del siglo, que ha dejado ya al menos 13 muertos, según datos de cuerpos de seguridad.
Aunque la situación comenzará a remitir este miércoles, todavía ocho comunidades autónomas continúan con alerta por fuertes lluvias, tres de ellas, Andalucía, Castilla-La Mancha y Cataluña, con riesgo importante, en nivel en naranja, según la Agencia Estatal de Meteorología (Aemet).
La Comunidad Valenciana que ha llegado incluso al nivel rojo con riesgo extremo, reducirá el nivel a amarillo (riesgo para ciertas actividades) en la jornada de hoy, aunque las nuevas lluvias pese a ser menos intensas seguirán incrementando los caudales de ríos y complicarán la situación.
El presidente de la Generalitat Valenciana, Carlos Mazón, ha anunciado que se ha activado "el procedimiento de múltiples víctimas" ante la devastadora dana.
La Unidad Militar de Emergencias (UME) se ha desplegado en varios municipios valencianos y continúa con tareas de rescate y evacuación de personas en zonas inundadas.
Por otra parte, esta madrugada el Gobierno de Castilla-La Mancha ha solicitado también la activación de la UME por los efectos de la lluvia en la provincia de Cuenca, y en Albacete continúa la búsqueda de desaparecidos.
La gota fría que sufre la Comunidad Valenciana es la peor de este siglo XXI, comparable a las vividas en 1987 y en 1982, la de la "Pantanada de Tous", según el primer balance ofrecido por la Agencia Estatal de Meteorología en la red social X.
Ya habrá tiempo para hacer una valoración más profunda, pero está siendo "catastrófico" desde el punto de vista climático las lluvias torrenciales en la provincia de Valencia.
El Gobierno ha creado un comité de crisis para el seguimiento de la dana, y los responsables del operativo de Emergencias en Valencia se han reunido a las 6 de la madrugada para analizar la grave situación que está complicando mucho las labores de rescate por la complejidad del acceso a las víctimas, según ha admitido el presidente valenciano, Carlos Mazón.
Multitud de imágenes dantescas llevan circulando en redes sociales donde se ven riadas arrastrando coches con gente encima, puentes derruidos por el agua, rescates en situaciones extremas de alto riesgo y destrozos millonarios.
La gente se está refugiando en alturas, desde techos de edificios a camiones, ante el riesgo de ser arrastrados.
La red principal de carreteras de Valencia ha sido cortada en varios puntos de la A-3 y la A-7, la autovía de Torrent CV-36, la V-30 y la V-31.
El servicio de Metrovalencia sigue suspendido hasta nuevo aviso y no está prevista actividad durante la mañana de este miércoles; además los centros educativos de parte de la provincia de Valencia, entre ellos los de la capital, permanecen cerrados este miércoles.
Esta madrugada la Confederación Hidrográfica del Júcar (CHJ) informó del descenso del nivel del agua de la presa de Forata en la localidad de Yátova al evacuar un caudal de 900 metros cúbicos por segundo tras abrir las compuertas; durante "bastantes horas" la entrada al embalse fue de 2.000 metros cúbicos por segundo.
La presa controla el caudal el rio Magre, un afluente del Xúquer en su margen izquierda, y uno de los más afectados por el episodio de lluvias torrenciales que ha vivido en estas últimas horas la provincia de Valencia.
El cauce se desbordó este martes en localidades como Utiel, donde hay constancia de numerosos daños materiales; en localidades como Chiva se han recogido cerca de 500 litros por metro cuadrado, uno de los registros más altos de los últimos veinte años.
En otras zonas del país como en la comunidad de Madrid el 112 ha atendido en las últimas horas más de 375 avisos por incidentes la mayoría árboles caídos. EFE