Madrid, 30 oct (EFE).- Organizaciones ecologistas han criticado la actuación de los sistemas de alerta y emergencia tras el impacto de la dana que anega España y ha causado ya al menos 70 fallecidos, y han relacionado esta catástrofe natural con los efectos del cambio climático, para el que piden "medidas urgentes".
Tras lamentar las víctimas mortales y trasladar su solidaridad a las personas afectadas especialmente en la Comunidad Valenciana y Castilla-La Mancha en las últimas horas, Ecologistas en Acción ha denunciado en un comunicado "la tardanza de actuación por parte de los responsables políticos de los sistemas de alerta y emergencias" y ha exigido "mayor eficiencia y rapidez en los avisos y actuaciones" del gobierno de la Generalitat Valenciana.
La ONG ecologista señala que, a pesar de la alerta de la Agencia Estatal de Meteorología diez horas antes de la llegada de la dana, el Centro de Coordinación de Emergencias autonómico estableció el nivel de emergencia por el temporal en situación 2 del plan especial de inundaciones en la provincia de Valencia a las 19:30, "cuando ya se había desbordado el río Magro en los términos municipales de Carlet y Algemesí".
Además, denuncia que "no se envió una alerta a la población hasta las 20:12", cuando "muchas personas ya se habían desplazado de sus centros de trabajo y estaban sufriendo las consecuencias de las precipitaciones".
Esta organización ha insistido en que "España es un país particularmente vulnerable a las consecuencias de la crisis climática" y, por ello, ha criticado también "la falta de una regulación urbanística adecuada y de un modelo forestal y agrícola adaptado"; así como "ignorar los planes de riesgo de inundación o la falta de medidas eficaces para la adaptación y respuesta de las emergencias", cuestiones que a su juicio "deben abordarse de forma urgente".
Además, considera que este episodio "debe acelerar la implantación de medidas urgentes, que ofrezcan respuestas inmediatas y eficaces, avanzando en la descarbonización urgente de la economía" para "poner en el centro al planeta y las personas".
En el mismo sentido, la directora ejecutiva de Greenpeace, Eva Saldaña, ha expresado sus "más profundas condolencias" a las víctimas y los familiares y ha afirmado que "el cambio climático es esto: la intensificación de fenómenos meteorológicos extremos con un nivel de destrucción cada vez mayor" e "ignorarlo provoca muertes que no nos podemos permitir".
Greepeace define las "elevadas temperaturas del Mar Mediterráneo, por encima de la media desde abril de 2022" y el calentamiento de la atmósfera como "un cóctel terrorífico" al que hay que sumar una gestión hidrológica con "cauces fragmentados" y "zonas inundables urbanizadas", lo que agrava los impactos de las lluvias torrenciales incluso en zonas donde no ha llegado a llover pero han visto sus ríos desbordados por un caudal extraordinario.
Por ello exige "medidas ambiciosas urgentes para reducir las emisiones y frenar el avance del cambio climático y de sus impactos" además de potenciar la restauración de ecosistemas y del flujo natural del ciclo hidrológico, así como adaptar municipios y entornos.
Respecto a los costes de las pérdidas y daños causados por estos siniestros y los de adaptación y mitigación, "para Greenpeace está muy claro que deben pagar los responsables: las corporaciones de los combustibles fósiles" y pide que se defina esta responsabilidad en la próxima cumbre climática COP29 que se celebrará en pocas semanas en Bakú (Azerbaiyán). EFE