Madrid, 26 oct (EFE).- El Estatuto del Artista es una prioridad del Ministerio de Cultura, "pero tiene que serlo para el conjunto del Gobierno", afirma la directora general de Derechos Culturales, Jazmín Beirak, que observa progresos en Trabajo, pero no en fiscalidad, donde los ministerios de Hacienda y Seguridad Social "avanzan lentamente".
En declaraciones a EFE, Beirak explica que la regulación de los menores de 16 años que trabajan en el sector artístico está "camino de resolución" a través de la modificación del real decreto 1435/1985 que regula la relación laboral de los artistas, pero cuestiones como un tratamiento especial de las rentas irregulares de los artistas para que se tengan en cuenta "sus altibajos" se ralentizan cuando se topan con Hacienda y Seguridad Social.
Y es que aunque "el liderazgo" sea de Cultura, "el Estatuto del artista es una agenda del Gobierno" y hay que avanzar en asuntos como la revisión del catálogo de deducciones de IRPF o un sistema de cotizaciones especifico para los artistas autónomos: "Y eso es competencia de los ministerios de Hacienda y Seguridad Social".
Esta semana el grupo técnico de Cultura y Hacienda relativo al Estatuto del Artista se ha reunido, también con el sector de profesionales. Los artistas declaran sentir "impotencia" ante la falta de resultados y urgen a dar un empujón final para que este Estatuto se convierta en una realidad en 2025.
"Hay disposición, pero el horizonte es lejano" señala en declaraciones a EFE el responsable institucional de la Unión de Actores y Artistas, Ignacio Martín Pina, que lamenta que "los meses vayan pasando sin que se adopten decisiones definitivas".
Para este sindicato urge el tema de protección a los menores y considera una "barbaridad" que niños de menos de 16 años puedan trabajar en un set de rodaje jornadas de hasta 8 horas.
Si bien en este asunto, y según Cultura, habrá resultados en el corto plazo ya que se trata de un ámbito que afecta al Ministerio de Trabajo, de Yolanda Díaz.
La intermitencia en la vida laboral de un artista impide la estabilidad. "Los rendimientos de trabajo de un artista son una montaña rusa, por eso se hace necesaria una visión amplia porque los rendimientos de un año, muchas veces valen para varios", dice Martín Pina.
Prácticamente nadie tiene contratos estables, la vida laboral de un artista es "de un sitio a otro, contractualmente y físicamente".
Con este escenario hay tres propuestas en la mesa de fiscalidad, aprobadas unánimemente por el Congreso, pero que no acaban de arrancar.
En la primera de ellas se pide que el pago de impuestos se contemple haciendo una media de los últimos 3-4 años; también se demanda un promedio en los tipos de IRPF y que el concepto de renta irregular se aplique al salario de los artistas.
También la Unión de Músicos, una federación de 16 asociaciones que representa a unos 4.000 profesionales, se manifiesta sobre el Estatuto del Artista.
En declaraciones a EFE su presidente, Guillem Arnedo, subraya que el colectivo pide una cotización a la Seguridad Socia conforme a los ingresos reales, adaptada a los bajos salarios y a la independencia de los músicos.
Otro punto que reivindican es un registro de las enfermedades profesionales, que no está actualizado. Aquí se refieren, por ejemplo, a la distonía focal, consecuencia del estrés y de repetir mucho un pasaje lo que hace que los músculos encargados de la interpretación no respondan.
También quieren el registro de otra enfermedad común entre los músicos: el tinnitus, un fenómeno perceptivo consistente en notar sonidos o pitidos en el oído, que no proceden de ninguna fuente externa, por lo que otras personas no pueden escucharlos.
Arnedo coincide con su colega de la Unión de Actores en el tema de rendimientos irregulares: "Un año estás trabajando y el otro exhibiendo, el año que produces solo tienes pérdidas y el que exhibes, ganancias, pero a los ojos de Hacienda no cuenta que para esa actividad has trabajado dos años".EFE
(Recursos de archivo en www.lafototeca.com Código 21784917 y otros)