Producción y demanda impulsan a la química, que en 2025 superará 90.000 millones en ventas

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Madrid, 24 oct (EFECOM).- El sector químico español estima cerrar este ejercicio con un crecimiento de la producción del 7,1 % y un alza de 4,8 % en la cifra de negocios, hasta los 86.453 millones de euros, apoyado en el mercado exterior y la recuperación de la demanda tras el ajuste de 2023.

Según las previsiones de la patronal Feique, reveladas este jueves en su asamblea general, en 2025 se estima que la producción siga creciendo hasta el 3,2 % y la cifra de negocios un 4,2 %, hasta superar, por primera vez, los 90.000 millones de euros, recuperando la caída de ventas sufrida el año pasado por el ajuste de precios.

Sin embargo, el comportamiento por subsectores está siendo desigual. Así, la química de consumo, especialidades y salud son las principales responsables de este crecimiento; mientras la química básica continúa sin mostrar signos de recuperación productiva por los altos costes energéticos y de derechos de emisión.

"Son unas cifras muy buenas, pero tenemos compañeros que han tenido que sufrir mucho durante este 2024", ha lamentado durante el acto de clausura la presidenta de Feique, Teresa Rasero, que ha sido reelegida por unanimidad en el cargo hasta 2026.

Detrás de esta evolución dispar se encuentra, dice Feique, el alto coste energético. De hecho, la química básica es la que realiza la primera transformación de las materias primas y para este proceso requiere un alto consumo de energía.

En este sentido, la presidenta de Feique ha advertido de dos factores de coste que tienen un profundo efecto negativo en Europa respecto a otras áreas geográficas, como son los altos precios del gas y la electricidad, y el coste de los derechos de emisión.

"Necesitamos precios energéticos más competitivos y acelerar los procesos de descarbonización, que son los aspectos clave para el futuro de la economía productiva europea", ha subrayado.

También se ha referido a esta problemática el presidente de la patronal empresarial CEOE, Antonio Garamendi, que ha insistido en que en un momento como el actual, en el que "hay nubarrones", "no hay que abandonar la industria", sino cuidarla.

En su discurso, la presidenta de Feique ha recalcado que la descarbonización completa del sector químico español, para antes de 2050, es una prioridad para esta industria.

Para afrontar dicho proceso, estima que requerirá invertir 75.000 millones de euros en el periodo 2025-2050. Esto supone una inversión anual de 3.000 millones, de los cuales, 1.700 millones se refieren estrictamente al capex; otros 850 millones, al coste de parada de las operaciones para abordar las modificaciones tecnológicas; y 450 millones incluirían los costes de mantenimiento.

La patronal valora el anteproyecto de Ley de Industria y Autonomía Estratégica en aspectos como el nuevo modelo de gobernanza y los nuevos mecanismos e instrumentos que contempla para el desarrollo de la política industrial.

Pero considera que debe completarse con la creación de un Fondo para la Descarbonización que incorpore el apoyo a los numerosos proyectos de inversión existentes, pero todavía latentes, y, muy especialmente, a los costes de operación.

Desde su punto de vista, al menos el 50 % de los ingresos procedentes de los derechos de emisión, que el pasado año alcanzaron los 3.500 millones de euros, deberían ser la fuente de ingresos principal del mismo, pues la propia industria los abona directa o indirectamente.

"Calculamos que el fondo debería aspirar a una cifra cercana a los 2.500 millones de euros anuales", ha indicado Rasero, que ha avanzado que, a principios de 2025, trasladarán al Ministerio de Industria un informe detallado sobre el diseño de los contratos por diferencia en España.

En líneas generales, las buenas estimaciones que maneja el sector repercutirán de forma positiva en la creación de empleo, que previsiblemente crecerá un 4 %, hasta los 242.000 empleos directos al cierre de 2024; y un 3 % para el próximo ejercicio, hasta alcanzar la cifra histórica de 250.000 personas asalariadas directas.

De acuerdo con la patronal, se trata de un empleo de "alta calidad", cualificado, estable y de alta remuneración (con una media superior a 42.000 euros al año en 2023), que aspira a rebasar los 45.000 euros en 2024. EFECOM

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