El secretario general del PSE-EE, Eneko Andueza, ha acusado al PNV, socio de gobierno de su partido en el Ejecutivo vasco y las tres diputaciones forales, de plantear un modelo de "dumping fiscal" que responde a "intereses personales o de partido" al cuestionar la posibilidad de que el impuesto especial a las empresas energéticas y a la banca adquiera un carácter permanente.
Andueza, en declaraciones a los medios de comunicación a su llegada al Parlamento Vasco, ha respondido de esta forma a las afirmaciones que en torno a este asunto han realizado en los últimos días el lehendakari, Imanol Pradales, y la diputada general de Gipuzkoa, Eider Mendoza.
Pradales advirtió este pasado martes de que hacer que continúen vigentes los impuestos a los sectores financiero y energético, tal y como propone el Gobierno central, "no es la manera más adecuada de favorecer que se desarrolle industrialmente el tejido en un país".
Por su parte, Mendoza afirmó este pasado miércoles que si finalmente, en el ámbito estatal, se establece el carácter permanente de estos tributos, en el caso de los territorios históricos vascos --en cuyas instituciones recaen las competencias fiscales en el caso de la comunidad autónoma-- deberán ser sus respectivas juntas generales las que realicen una valoración al respecto "para luego poner en marcha o no" esta figura impositiva.
"PERDONAR IMPUESTOS" A IMAZ
Andueza ha advertido al lehendakari y a la diputada general de Gipuzkoa de que entre "perdonar impuestos a su compañero de partido [en referencia al consejero delegado de Repsol, Josu Jon Imaz] o aplicar el descuento o la gratuidad en el transporte a los menores de 12 años, yo digo sí a los segundos sin ningún lugar a dudas".
En este sentido, ha acusado al PNV de proponer un modelo de "dumping fiscal", práctica consistente en una bajada agresiva de impuestos para competir con otros territorios en la atracción de empresas o contribuyentes. Todo ello --según ha afirmado Andueza-- con el único fin de atender a los "intereses personales o de partido" de la formación 'jeltzale'.
El dirigente del PSE ha avisado a su socio en el Gobierno Vasco y en las diputaciones forales de que para poder llevar aplicar un modelo de este tipo "le hace falta una mayoría en las juntas generales de la que no dispone".
Por ese motivo, ha reclamado al PNV que actúe "con un poquito más de mesura y de prudencia", y que "espere al devenir de los acontecimientos" en relación al posible mantenimiento de los impuestos a las empresas energéticas y del sector de la banca.
REFORMA DEL ESTATUTO
Andueza también ha reiterado sus críticas al PNV por los mensajes que está trasladando en las últimas semanas en relación a un eventual cambio en el sistema de autogobierno de Euskadi.
El dirigente socialista ha reprochado a los 'jeltzales' que sus propuestas en esta materia estén orientadas a avanzar hacia "un nuevo estatus" para Euskadi, y no a diseñar un nuevo Estatuto de Autonomía.
"No hay que confundir a la gente; no se puede confundir entre el nuevo estatuto y el nuevo estatus, porque no son lo mismo", ha manifestado Andueza, quien ha asegurado que "el nuevo estatus persigue que Euskadi sea independiente", y que su partido "siempre va a estar en contra" de ese objetivo.
Andueza ha añadido que las posturas de PNV y PSE en torno a este asunto "son legítimas y democráticamente defendibles", y que el hecho de que un gobierno esté integrado por dos partidos "de tradiciones políticas diferentes" conlleva que, de acuerdo a "la normalidad política y democrática", cada cual "defienda lo suyo en determinadas parcelas".
En este sentido, ha recordado que el acuerdo de gobierno entre el PNV y el PSE "es muy claro al respecto de esta cuestión y tiene una hoja de ruta que fija, dentro de la legalidad, la transversalidad y la búsqueda de unas mayorías más amplias, un nuevo pacto estatutario que abra un nuevo tiempo en Euskadi".