Santiago de Compostela, 23 oct (EFE).- La investigadora Iolanda Leite, una ingeniera computacional experta en robótica del Real Instituto de Tecnología de Estocolmo, considera que aún es prematuro disponer de un robot autónomo para tareas domésticas, aunque ya hay prototipos y proyectos capaces de efectuar varias labores.
"El hardware ya esta ahí. Es caro, desde luego, pero para poder operar autónomamente sin control humano es todavía difícil", afirmó Leite en declaraciones a EFE tras su intervención en la Conferencia Europea de Inteligencia Artificial (ECAI en sus siglas en inglés), que celebra estos días su reunión anual en Santiago de Compostela.
La ingeniera portuguesa, doctorada por la Universidad de Lisboa y que participó en programas de investigación en la Universidad de Yale (EEUU) y de un laboratorio de la multinacional estadounidense de entretenimiento Disney, está especializada en la denominada 'robótica social' y se ha dedicado a favorecer que las máquinas puedan ayudar a las personas, en particular a niños con problemas.
"Mi trabajo no se centra tanto en la labor de aplicaciones sino en hacer posible que un robot pueda comprender el contexto social y responder de manera apropiada independientemente de la tarea que trate de resolver", explicó.
Varios proyectos piloto de robots en Europa y otras partes del mundo tratan de facilitar que máquinas pueden contribuir a resolver la vida cotidiana de personas que requieren asistencia, incluidas las personas mayores que vivan solas.
"Hay aún mucho un trecho para que los robots puedan trabajar en casa o en cualquier tipo de situación de manera autónoma", explicó, aunque subrayó que ya hay vehículos autónomos funcionando de manera experimental con buenos resultados.
Destacó que en los hogares proliferan también aspiradores que funcionan de manera autónoma y aplicaciones de otros electrodomésticos que progresivamente podrían mejorar sus prestaciones.
Sin embargo, destacó que todo ello requiere una recopilación de grandes cantidades de datos y de inteligencia artificial para poder facilitar el software necesario de desarrollo capaz de proveer de autonomía a las máquinas.
Subrayó que el reconocimiento de voces y de gestos por parte de máquinas es una ámbito de requiere muchos datos y un amplio estudio para llegar finalmente a un entrenamiento, algo que no es una tarea sencilla, proclamó.
Los robots de ahora pueden responder al teléfono o hacer tareas sencillas, aunque en algunos prototipos sus promotores aseguran que pueden planchar, lavar y hacer simples tareas del hogar.
Leite aspira a que pueden ser de gran ayuda para la población, incluido para personas mayores en lugares donde cada vez es más difícil encontrar trabajadores para labores de asistencia en el hogar, pero destacó que aún faltan algunos pasos para poder comprar un robot en tienda.EFE
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