Fernando Sanz
Valladolid, 22 oct (EFE).- Una “mancha” negra que se expande es la metáfora de la que Santiago Maza se sirve para retratar la violencia contra los informadores en México, una situación que a su juicio se que vio fortalecida por la negación del problema por parte del anterior presidente, Antonio Manuel López Obrador (AMLO).
“El documental hace un esfuerzo en dejar muy claro este problema no lo generó López Obrador, es heredado por diferentes administraciones, independientemente del partido, pero el principal fallo de la anterior administración fue no reconocerlo”, explica Maza en una entrevista telefónica con EFE a raíz de la proyección este martes de su documental 'Estado de silencio' en la 69ª Semana Internacional de Cine de Valladolid (Seminci).
Es un problema que, según cifras de la oenegé Artículo 19, ha dejado desde 2000 a 163 periodistas asesinados y 32 desaparecidos, y que Marza aborda en una cinta de algo más de ochenta minutos estrenada dentro de la sección Proyecciones Especiales.
López Obrador “nunca vio las consecuencias” de negar esta violencia, por lo que Maza reclama un "cambio de conciencia" a la nueva presidenta, Claudia Sheinbaum, para alcanzar soluciones “humanas” pero también “muy contundentes” como la financiación de los protocolos de seguridad para informadores o mejores condiciones laborales para garantizar la libertad de informar.
'Estado de silencio' tiene como productora a 'La corriente del Golfo', la empresa de los actores Diego Luna y Gael García Bernal, una dupla en la que "Gael cuida y nutre el proyecto, pero Diego ha tenido un papel muy activo", según explica Maza.
Diego Luna se ha involucrado en alzar la voz y usar su figura pública para llamar la atención sobre la libertad de prensa en México porque es "un tema que le preocupa mucho".
Esta cinta es el segundo largometraje documental de Maza, que debutó con 'Truenos de San Juan', y que en esta ocasión pone el foco en la historia de cuatro periodistas mexicanos, reporteros de medios locales que abordar asuntos como la inmigración, la destrucción del medio ambiente o las consecuencias del narcotráfico en sus entornos.
Es una cinta coral centrada en la historia de Jesús Medina, Marcos Vizcarra, Juan de Dios García y María de Jesús Peters, pero en la que también aparecen otros informadores como Marcela Turati, John Gibler o Carmen Arístegui, además del director de Artículo 19, Leopoldo Maldonado, o Griselda Triana, viuda de Javier Valdez, asesinado en 2017.
“Quiero pensar que viendo las cuatro historias uno puede deducir que son cientos y cientos de periodistas que están así en México, que viven un compromiso con su oficio, pero también viven desplazados y amenazados”, incide.
Para llevar a cabo este documental, Maza ha contado con un pequeño equipo de cinco personas para mantenerse “lo más ágiles posibles” y recorrer lugares como Morelos, Sinaloa, Chiapas o el propio Distrito Federal, una viaje de miles de kilómetros en el que han contado con la asistencia de Artículo 19, para “no exponerse de más”.
Maza explica a EFE que el documental es “una declaración de admiración y respeto” a los informadores de México para que "no se sientan solos", porque la soledad y la salud mental de estos reporteros era uno de los temas presentes desde la concepción del proyecto.
El cineasta mexicano vincula la precariedad laboral con la falta de salud emocional, una preocupación tan importante que llegaron a ofrecer a algunos de los periodistas la posibilidad de acudir a sesiones de terapia para “no llevarlos al límite”, un ofrecimiento que algunos aceptaron.
“Eso es lo que queremos erradicar: la soledad de los periodistas porque el más vulnerable es aquel que vive anónimo y en soledad”, subraya antes de incidir en la necesidad de pensar una solución colectiva para que evitar ese aislamiento ante las amenazas y que la libertad de prensa sea garantizada.
Maza mantendrá mañana un coloquio con el actor Ray Loriga en el Paraninfo de la Universidad de Valladolid (UVa), en el que también estaba prevista la presencia de Diego Luna, que no ha podido asistir a Seminci “por causas de fuerza mayor que han obligado al actor a viajar a México”, según informó ayer la organización del festival. EFE
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