España se encamina hacia un nuevo récord de pasajeros aéreos en 2024

Madrid, 22 oct (EFECOM).- La evolución positiva del tráfico aéreo en este verano y la capacidad desplegada por las aerolíneas para la próxima temporada de invierno anticipa un nuevo año récord de pasajeros, superando los históricos 283 millones alcanzados en 2023, ha avanzado este martes el presidente de la Asociación de Líneas Aéreas (ALA), Javier Gándara.

Entre abril y septiembre, se transportaron en España 177 millones de pasajeros, un 8,6 % más que un año antes, en más de 1,2 millones de vuelos comerciales realizados, un 7,4 % más, con incrementos en todos los segmentos, ha detallado Gándara en rueda de prensa.

En vuelos intercontinentales, viajaron más de 16 millones de pasajeros, lo que supone un repunte interanual del 16 %; en intraeuropeos, 107,4 millones (+10 %); y en nacionales, 53,6 millones (+5 %).

ALA augura también un invierno de récord, con una oferta de asientos prevista desde finales de octubre hasta finales de marzo de 137 millones un 11,6 % por encima de lo operado en la misma temporada del ejercicio pasado.

Gándara ha destacado los aumentos de Canarias y Andalucía, que se sitúan por encima de la media, con un 13 % y un 14 %, respectivamente; aunque prácticamente todas las regiones muestran unas perspectivas positivas.

Las cifras de capacidad ofrecidas por ALA son ligeramente superiores a las difundidas ayer por Aena (que apuntaba a 134,2 millones de plazas, un 5,6 % más), al ser más actualizadas -a fecha de 15 de octubre-, mientras que las del gestor aeroportuario son del pasado 31 de agosto, ha explicado el directivo.

El responsable de ALA ha resaltado, asimismo, la buena evolución del tráfico de mercancías, que creció entre abril y septiembre un 20 % frente al mismo período de 2023, destacando el aeropuerto de Zaragoza, que, "con un desarrollo impresionante", se convierte en el segundo con más carga tras el de Madrid.

A pesar de ese escenario optimista, Gándara ha mostrado cautela por los factores externos que podrían condicionar la buena marcha del tráfico aéreo como la situación geopolítica inestable actual, con la escalada bélica en Ucrania y, especialmente, en Oriente Próximo, dada su afectación al precio del combustible, la evolución de la inflación o, en su caso, un deterioro de la situación económica.

Aunque el tráfico va a seguir creciendo este invierno, lo está haciendo ya a ritmos más moderados en los últimos meses, algo que resulta lógico, dado que es difícil avanzar a dos dígitos durante tanto tiempo, ha apuntado.

En su opinión, el contexto geopolítico inestable en el que nos encontramos "puede condicionar el buen comportamiento del tráfico aéreo y las previsiones de cara al invierno, además de los flujos de tráfico”.

Otro de los riesgos son las ineficiencias en la gestión del tráfico aéreo en Europa y, más concretamente, la falta de capacidad aérea en la red europea, principalmente en Francia, que está provocando "un preocupante aumento de los retrasos".

Entre los meses de junio y agosto pasado, aunque el tráfico aéreo en Europa todavía estaba un 2,6 % por debajo del nivel pre-pandemia, los retrasos en ruta por congestión aérea han sido un 55 % mayores que los de 2019, alcanzando unos niveles que no se han visto desde 1999.

Además, deben tenerse en cuenta otros factores que podrían comprometer la viabilidad del sector aéreo más en el medio y largo plazo, y con ello, la conectividad, como es la elevación de costes de las compañías aéreas por la descarbonización.

En este sentido, Gándara ha puntualizado que la transición ecológica de la aviación debe hacerse desde una perspectiva medioambiental, pero también social y económica, preservando la democratización lograda de la aviación.

A su juicio, ello se logrará apostando por aquellas soluciones que sí descarbonizan, como el combustible sostenible de aviación (SAF), frente a medidas fiscales que elevan costes y no descarbonizan.

Por ello, ha vuelto a pedir incentivos a la producción de SAF para garantizar el suministro en España de acuerdo con los objetivos establecidos: el uso del 2 % de SAF en 2025 y su escalada progresiva hasta un 70 % en 2050.

Ante dichos factores de riesgo, la asociación pide al Gobierno que exija a al resto de Estados miembros de la UE que solucionen los problemas de capacidad de gestión de tráfico aéreo y que apoye la implementación del Cielo Único Europeo.

También ha reclamado que se evite la imposición de un impuesto al queroseno, que tendría "un efecto desproporcionado sobre el turismo y la conectividad en España"; y el desarrollo de políticas públicas para incentivar la producción de SAF en España. EFECOM

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