El Matisse más desconocido, el de la escultura de la figura humana, en la Fundación Canal

La exposición 'Matisse Metamorfosis' en la Fundación Canal presenta 33 esculturas del artista, destacando su exploración del cuerpo humano y la conexión entre escultura y pintura, con obras y dibujos de diferentes etapas

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Madrid, 22 nov (EFE).- El Matisse más desconocido se puede contemplar ya en la Fundación Canal de Madrid donde se exhiben 33 esculturas de la figura humana, más de un tercio de las que esculpió en su vida este artista, uno de los más influyentes del siglo XX.

Bajo el titulo 'Matisse Metamorfosis. Esculturas y dibujos', la exposición, que ha sido presentada este martes y está organizada por la fundación en colaboración con el Museo Matisse de Niza y el Kunsthaus Zürich, con el apoyo de Manifesto Expo, muestra 33 de las 84 esculturas creadas por el artista, al que le gustaba modelar tanto como pintar, según el mismo reconocía en 1913.

Henri Matisse (Francia, 1869-1954) estaba en un constante estudio del cuerpo humano, del desnudo y la naturaleza, como ha subrayado Eva Tormo, directora gerente de la Fundación Canal.

Las siluetas y los perfiles angulosos de sus esculturas componen esta muestra en la que dominan figuras agachadas, acurrucadas y encogidas de mujeres de pequeño formato, que le sirven para estudiar el cuerpo humano y experimentar con sus formas para luego aplicarlo a su pintura, como ha señalado la comisaria asociada de la muestra, Popy Venzal.

Figuras también tumbadas, de mujeres relajadas, en las que el autor de 'La habitación roja', explora, según la experta, la sensualidad y la intimidad, temas a los que recurre el artista que también plasma el cuerpo de mujeres con los brazos levantados, como en tensión, mostrando así la energía del cuerpo.

"Admitiendo que existe cierta riqueza en algunos de mis lienzos -argumentaba Matisse hace casi un siglo- no dudaría en abandonar la pintura si mi expresión tuviera que manifestarse por otra vía. Así que, para expresar la forma a veces recurro a la escultura, que me permite en lugar de situarme frente a una superficie plana, girar alrededor del objeto y conocerlo mejor".

Es una de las frases del artista que encabezan la muestra en la que, en otra sala, se puede ver al Matisse más afectivo, con retratos de familiares y tres de las cinco esculturas de cabezas femeninas de la serie Jeannette, en las que parece estudiar su fisonomía y explorar distintas técnicas de creación.

'Motivos y variaciones' es otra sección de este conjunto 'excepcional', como ha remarcado la comisaria del Kunsthaus Zürich, en la que se ven ya dibujos del artista, realizados con veinticinco años de diferencia.

Y es que Matisse fue un entusiasta del dibujo, de los grabados, que le ayudaban a visualizar el proceso creativo y las distintas etapas de su trabajo.

Además de la treintena de esculturas, se exhiben 23 dibujos y litografías, y un lienzo, junto a fotografías y documentos de la época y dos esculturas de Aristide Maillol. Son 66 piezas que dan una visión nueva del artista, y muy diferente a la del color suave a la que tiene acostumbrados a los admiradores de su arte. EFE

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