Madrid, 18 oct (EFE).- El Congreso de los Diputados estudiará, como siempre hace, cualquier petición del Senado, que instará de nuevo a la Cámara Baja a reconsiderar su postura sobre la aprobación de la ley de antecedentes penales.
Fuentes de la Mesa del Congreso han indicado que si el Senado le solicita una rectificación, tal y como este viernes ha reclamado el PP -con mayoría en la Cámara-, se le dará la oportuna respuesta e insisten en que no hay ninguna voluntad de contribuir a conflictos ni tensiones entre ambas instituciones.
El PP ha anunciado además que si la Mesa del Congreso no rectifica y la ley de antecedentes penales no vuelve a ser votada en la Cámara Baja, entonces la Cámara Alta planteará un conflicto de atribuciones al Tribunal Constitucional.
Desde el Congreso apuntan que si finalmente se planteara dicho conflicto de atribuciones ello permitirá ajustar más los plazos y facultades del Senado, al tiempo que insisten en que el caso es claro. Las mismas fuentes consideran que el Senado ha cometido infracciones de bulto en su tramitación, incluyendo un error palmario como el de haber vulnerado el plazo constitucional de 20 días naturales para su paso por la Cámara Alta.
Congreso y Senado difieren sobre el momento en que se encuentra el proyecto de Ley sobre intercambio de información de antecedentes penales y consideración de resoluciones judiciales penales en la Unión Europea, que permitirá que algunos etarras computen sus tiempos de prisión en otros países de la Unión para su condena en España.
Mientras que la Cámara Baja considera aprobada la norma, el Senado dar por vetado el texto, por lo que debería, a su juicio, volver al Congreso para su aprobación definitiva.
La Mesa del Congreso aprobó el pasado martes el acuerdo en el que señalaba que el proyecto de ley había sido rechazado por la Cámara Alta fuera de plazo y que el acuerdo de rechazo "no puede ser considerado un veto" conforme a los plazos que marca la Constitución.
El Boletín Oficial de las Cortes ha publicado este viernes el acuerdo de la Mesa sobre el proyecto de ley, que ha supuesto un nuevo enfrentamiento entre ambas cámaras, tras el que se vivió con la ley de amnistía. EFE