París, 14 oct (EFECOM).- El patrón de Stellantis, Carlos Tavares, no excluye el cierre de plantas de las marcas de su grupo ante la competencia china, que consideró que no se detendrá por el alza de aranceles a nivel europeo.
"No hay que excluir nada", aseguró el consejero delegado a la pregunta de si se plantea cerrar plantas o vender alguna de la quincena de marcas que gestiona.
Tavares hizo esas declaraciones en una entrevista que publica este lunes el diario económico Les Echos, con motivo de la apertura del Salón del Automóvil de París.
"Si los chinos se hacen con el 10 % del mercado en Europa al término de su ofensiva, eso son 1,5 millones de coches. Equivale a siete plantas de montaje. Los constructores europeos tendrán que cerrarlas o venderlas a los chinos. De eso no habla nadie", aseguró.
El directivo del grupo que controla marcas como Citröen, Peugeot, Fiat u Opel aseguró que "el cierre de fronteras a los productos chinos es una trampa" porque "se saltarán las barreras invirtiendo en plantas en Europa" en parte con "subvenciones estatales" de su país "a bajo coste".
"En ese momento, nadie tendrá que sorprenderse si hay que cerrar plantas para adaptar el sobrante de capacidad de producción que se habrá agravado", agregó. EFECOM