Vox busca fórmulas para priorizar la venta de viviendas a españoles frente a extranjeros

Vox propone deducciones fiscales para promover la venta de viviendas a familias españolas y desincentivar la compra extranjera, argumentando el impacto negativo en la clase media y popular española

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Madrid, 11 oct (EFE).- Con la vivienda avanzando en la lista de problemas que más preocupan a los españoles y en vísperas de la manifestación convocada en Madrid para pedir soluciones, Vox está buscando fórmulas que permitan "priorizar al comprador español frente al extranjero" a la hora de adquirir una casa.

Una de las medidas que contempla es otorgar "deducciones fiscales a los promotores que vendan a familias su primera vivienda", lo cual "no es habitualmente el caso del comprador extranjero", según el portavoz de Vivienda de Vox en el Congreso, Carlos Hernández, que está explorando esta vía junto con un grupo de asesores de dentro y fuera de su partido.

"Se trata de que, si el promotor vende a una familia la que va a ser su primera vivienda y su vivienda habitual, que tenga unas deducciones que conviertan en atractiva la venta, no al comprador extranjero, para el que puede ser su segunda o tercera vivienda y la puede utilizar para el alquiler de temporada o turístico, sino a la familia nacional", explica el diputado.

En busca del encaje legal de este tipo de medidas, Vox está estudiando lo que ya se ha hecho en otros lugares para "limitar la demanda extranjera" y los resultados que han tenido.

Según sus datos, tres países son los que han abordado este asunto: Canadá, Holanda y Australia, a los que se suma Portugal con alguna iniciativa adoptada la legislatura pasada.

En ellos se han adoptado medidas que van "desde la limitación de compra" a los ciudadanos extranjeros "al condicionamiento de compra, es decir, que aquello que se compra tiene que estar sujeto solamente a uso como primera vivienda o alquiler asequible en los siguientes cinco años".

En su diagnóstico de la difícil situación del acceso a la vivienda en España, Vox parte de que la "facilidad con que está entrando el comprador extranjero está obstaculizando el acceso a la vivienda a la clase media y las clases populares españolas".

Para Carlos Hernández, el ciudadano medio español "parece verse emparedado entre dos opciones", ya que por una parte no puede acceder  a la compra, porque cada vez está comprando más quien viene de fuera", y por otra tampoco tiene prioridad en las ayudas sociales y programas de acceso a la vivienda pública, frente a los inmigrantes sin recursos.

"Por arriba no puede comprar, pero por abajo tampoco puede acceder a un alquiler social, porque la entrada en España de cada vez más personas de menos recursos y de forma absolutamente indiscriminada, con ese efecto llamada masivo, hace que quede fuera de los planes de vivienda social", critica.

La necesidad de desincentivar la inversión extranjera en el sector residencial es una de las diferencias que marca Vox con la política de vivienda del PP, al que afea que "incluso en la Comunidad de Madrid se estuvo barajando una deducción del 20 % para el comprador extranjero, que no se barajaba frente al nacional".

Vox aplica así al mercado de la vivienda, igual que hace en otros ejes de su discurso que tienen que ver con la industria y el campo, el principio de "garantizar que el nacional parta con igualdad de condiciones y sea el que tenga acceso preferente" frente al extranjero.

"Igual que lo decimos con el tomate español, frente al tomate marroquí, lo decimos con el acceso a la vivienda", recalca Hernández. EFE

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