El ministro de Exteriores marroquí, Naser Burita, ha insistido en que el fallo del Tribunal de Justicia de la Unión Europea (TJUE) que anula los acuerdos pesquero y comercial no concierne de ninguna manera a Marruecos y ha puesto en cuestión la justificación dada por dicha corte, ya que considera que un "tribunal regional" no es quien para pronunciarse sobre un territorio, el Sáhara Occidental, que Rabat considera bajo su soberanía. "Es un golpe de espada en el agua", ha zanjado el jefe de la diplomacia marroquí, en una rueda de prensa tras recibir en Rabat al presidente de Canarias, Fernando Clavijo, y en la que ha recordado que ya en su primera reacción el Gobierno de Marruecos declaró que no era parte del litigio judicial. El TJUE señaló en su sentencia del viernes que los acuerdos comercial y pesquero son ilegales porque no cuentan con el aval explícito de la población saharaui, concediendo en este ámbito al Frente Polisario el estatus de representante legítimo. Sin embargo, Burita ha recalcado que sobre el "Sáhara marroquí" no cabe discusión alguna en materia de soberanía. "La cuestión del Sáhara se discute en el Consejo de Seguridad de Naciones Unidas, (...) no en ningún otro espacio", ha alegado el ministro, en declaraciones recogidas por 'Le 360'. Asimismo, ha apuntado que la dinámica internacional es "clara" en favor de la soberanía marroquí sobre la antigua colonia española o el plan de autonomía y ha recordado el aval de "países importantes" dentro de la UE como España o Francia. Sobre el futuro de las relaciones comerciales, Burita ha puesto la pelota en el tejado de la UE y ha dicho que tanto la presidenta de la Comisión Europea, Ursula Von der Leyen, como el Alto Representante de Política Exterior, Josep Borrell, han abogado públicamente por mantener alianzas. Espera que los gobiernos que se han posicionado en este sentido contribuyan a mantener esta cooperación.