Madrid, 7 oct (EFE).- Podemos ha señalado este lunes que el Gobierno será "responsable" de lo que les pase a las decenas de saharauis deportados en Barajas, y tanto Pedro Sánchez como Fernando Grande-Marlaska "tendrán las manos llenas de sangre", mientras que Sumar ha sido muy cauta en sus críticas al Ministerio del Interior.
"No ha sido la decisión correcta", ha dicho la secretaria de Comunicación de Sumar, Elizabeth Duval, preguntada sobre este asunto este lunes en rueda de prensa.
Además, ha reconocido que Sumar habría actuado de otra forma con los ciudadanos saharauis que habían solicitado protección internacional en el aeropuerto de Barajas, y quieren que "se esclarezca" y "se investigue" lo sucedido allí.
Mucho más contundente, Podemos ha condenado este lunes la deportación de 37 saharauis que habían solicitado asilo en España, 16 el pasado viernes y 21 el domingo, así como la "lamentable complicidad" del Gobierno con "la dictadura marroquí".
Según ha advertido en una rueda de prensa el secretario de Organización y portavoz de Podemos, Pablo Fernández, España "está deportando a personas que sufren represión, tortura y asesinatos" y "lo está haciendo para entregárselas a aquellos que la ejercen contra esas personas".
"El Gobierno será responsable de lo que le suceda a estas personas, Sánchez y Marlaska tendrán las manos llenas de sangre si le pasa algo, es una vergüenza lo que están haciendo", ha declarado en alusión al presidente del Gobierno y al ministro del Interior.
Por su parte, la responsable federal de Organización y del Área Interna de IU, Eva García Sempere, ha criticado en rueda de prensa la postura del Gobierno de Pedro Sánchez respecto al Sahara Occidental y ha dicho que el papel del ministro del Interior, Fernando Grande-Marlaska, es "impropio" de un Ejecutivo "que se llama progresista".
Quedan en las salas de asilo del aeropuerto al menos cuatro saharauis, de los cuales tres tienen previsto su retorno el próximo jueves, día 10, y uno está pendiente de su comparecencia ante el juez este lunes porque ha recurrido la denegación de su solicitud de protección. EFE
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