Sant Joan Despí (Barcelona), 7 oct (EFE).- La centrocampista del Barcelona, Keira Walsh, explicó este lunes en unas declaraciones publicadas por el club catalán lo especial que era para ella jugar en el Barcelona, especialmente porque “nunca había formado parte de un equipo con tanto soporte”.
La inglesa, que se enfrentará este miércoles a su exequipo, el Manchester City, se encuentra en un gran momento de forma, especialmente después de marcar el pasado sábado “el primer doblete” de su carrera. Algo que atribuye al juego coral del equipo y la confianza que el nuevo entrenador, Pere Romeu, deposita sobre ella; “siempre me anima a chutar, me hace sentir muy cómoda”.
“Pere es un gran entrenador, pero también una gran persona, intenta siempre entender como se siente todo el mundo”, aseguró, añadiendo que el técnico es “uno de los mejores con los que ha trabajado tácticamente”.
La pivote británica, que disputará su tercera temporada como azulgrana, comentó lo especial que era para ella vestir esta camiseta y el sentimiento de responsabilidad que esta conlleva. “Juego en el Barcelona para ganar todos los títulos, para repetir el póker, por eso firmé. No se trata solo de ganar, también es el estilo con el que ganas, con un buen futbol”, señaló.
“Siempre ha habido presión pero porque es un privilegio jugar para este equipo, pero usamos esa presión de motivación, por eso tenemos a dos balones de oro aquí”, dijo la futbolista de 27 años, asombrada, aún, por la “calidad de los entrenamientos” y segura de que día a día sigue “aprendiendo y mejorando”.
Sobre su próximo partido, la primera vez que se reencontrará con su exequipo y su ciudad natal, Walsh afirma que será “un test complicado”, pero que su equipo querrá “dominar” pero se enfrentará ante un rival “muy fuerte, con grandes jugadoras, paciente, y que intenta jugar desde atrás”, además, “tienen futbolistas que pueden cambiarte el partido”.
Sin embargo, más allá de reencontrarse con varias excompañeras, lo más especial para ella será volver a ver a varios de sus amigos y familiares; “estoy feliz de volver a casa, pero no será un partido fácil”. Un partido que será clave para eventualmente llegar su objetivo, repetir las finales; “jugamos muchos partidos y queremos llegar a todas las finales, ahí es donde queremos hacer nuestras mejores actuaciones”, resaltó.
Para Walsh será imposible olvidar la final en San Mamés del pasado mayo, dónde conquistaron su tercera Liga de Campeones. “Fue un sentimiento increíble, ganar como lo hicimos y con esa determinación”, ratifica, “lo más especial de estar aquí son las personas, el grupo, todo el mundo pone el equipo por delante, quieren luchar por este escudo”, concluyó. EFE
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