Madrid, 1 oct (EFECOM).- Urbas ganó 1,6 millones de euros en el primer semestre del año, ocho veces menos que un año antes, en un contexto marcado por el plan de reestructuración societaria y operativa de las sociedades del grupo adquiridas en años anteriores, especialmente constructoras, con el objetivo de mejorar su liquidez.
Entre enero y junio la cifra de negocios contabilizó los 111,5 millones de euros, el 26 % menos que un año antes, según las cuentas remitidas a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV).
Las medidas de dicho plan de reestructuración incluyeron, entre otras, la rescisión de contratos deficitarios; una mayor flexibilización de la estructura de costes; la reducción de costes de estructura o la aprobación de un plan de emisión de obligaciones convertibles en capital de Urbas para la cancelación de deuda con proveedores y subcontratistas.
Con respecto a Construcciones Murias, el pasado mes de marzo Urbas presentó un plan de restructuración para refinanciar su deuda y reorganizar sus operaciones. En dicho mes se decretó el concurso necesario de Murias, a instancias de ciertos acreedores, nombrándose a un administrador concursal.
Urbas ha presentado un recurso de apelación ante la autoridad judicial competente en contra de dicho decreto. Los acreedores que instaron el concurso han desistido de dicha solicitud y se está a la espera de que cese la situación concursal.
Con respecto a Construcciones Urrutia, en junio de 2023 se abrieron negociaciones con los acreedores para alcanzar un plan de restructuración que permitiera superar la situación de probabilidad de insolvencia, habiendo solicitado y obtenido una prórroga de otros meses 3 meses sucesivos a los tres meses iniciales.
En marzo de 2024 se presentó el plan de restructuración de Construcciones Urrutia con el objetivo de proceder a la reestructuración de su deuda financiera y comercial y en agosto, una vez aprobado por la mayoría de sus acreedores, se espera que la homologación judicial sea aprobada antes de finalizar el ejercicio.
En el caso de Ecisa, se ha presentado un plan de reestructuración para asegurar su viabilidad, así como el pago de todas sus deudas a sus acreedores y se espera que la homologación judicial sea aprobada antes de finalizar 2024.
Esta restructuración se ha traducido en una caída de la cifra de negocios y de la rentabilidad de la actividad nacional de construcción, mitigada en parte por la mejora de las operaciones en el mercado internacional.
Con independencia del éxito de estos planes, el grupo señala que no se verá afectado por esta situación de restructuración al tener garantizada su viabilidad y la del resto de sus negocios.
A cierre de junio Urbas tenía contraída una deuda financiera con entidades de crédito y pasivos por arrendamiento de 117 millones y continúa explorando oportunidades de inversión para diversificar y complementar el desarrollo de sus actividades tradiciones de promoción, construcción, ingeniería y energía. EFECOM