Ayuntamiento de Murcia recuerda en el aniversario a las 13 personas muertas en discotecas

Homenaje en Murcia a las 13 víctimas del incendio en Teatre y Fonda Milagros, con críticas de familiares por falta de ayuda y reclamos de justicia tras un año de dolor

Murcia, 1 oct (EFE).- El Ayuntamiento de Murcia ha hecho este martes un homenaje a las trece personas que fallecieron el 1 de octubre de 2023 en el incendio de las discotecas Teatre y Fonda Milagros, un acto en el que han participado bomberos, policía local, protección civil y los equipos de emergencia social, y que ha estado marcado por la ausencia de la práctica totalidad de los afectados.

De hecho, durante el homenaje, que ha durado unos cinco minutos, solo han estado presentes familiares de tres de los fallecidos, que han abandonado el lugar nada más terminar el acto oficial, sin esperar a las fotografías institucionales o al contacto con los medios de comunicación.

El acto ha comenzado con la colocación de una placa en memoria de los fallecidos con el lema “No hay adiós para aquellos que estarán siempre en nuestros corazones”, que ha sido destapada por el cónsul de Ecuador en la Región de Murcia, Patricio Villegas, y que se ubica en las inmediaciones de las discotecas incendiadas, en el polígono de ocio de Atalayas.

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Tras guardar un minuto de silencio en homenaje a los fallecidos y depositar una corona de laurel con los nombres de los trece fallecidos en el monolito, han leído un comunicado la trabajadora social del Servicio de Atención Móvil y Emergencia Social (SEMAS), Nieves Ortigas, y la psicóloga de Protección Civil María Soto, quienes atendieron a los afectados el mismo día del siniestro y en las jornadas posteriores.

La tragedia, han dicho, “sumió a Murcia en la más absoluta tristeza” y quienes estuvieron allí no han podido dejar de pensar en ella ni un solo día, por lo que este monolito quiere ser un recuerdo a la memoria de quienes ya no están y también al trabajo de los cientos de profesionales que colaboraron para ayudar a los afectados.

En ese sentido, la vicealcaldesa, Rebeca Pérez, ha dicho a los periodistas que, en este aniversario del incendio, “las emociones están a flor de piel, el dolor esta muy presente y ha dejado una huella imborrable”.

Desde que sucedió la tragedia, ha defendido, el objetivo ha sido atender a las personas afectadas y el Ayuntamiento lleva un año trabajando para intensificar los protocolos que puedan evitar que este tipo de situaciones se repitan.

Para ello, se han incorporado seis nuevos ingenieros técnicos, tres al servicio de prevención de incendios y tres más a un nuevo servicio de disciplina de actividades e instalaciones, se han redoblado las inspecciones y se han mejorado los protocolos para reducir en un 60 por ciento el tiempo de tramitación de legalización de expedientes.

Las discotecas incendiadas, que contaban con una sola licencia pese a ser dos negocios independientes, tenían en vigor una orden de cese de actividad que no se había ejecutado y habían solicitado varios procedimientos de legalización que nunca llegaron tampoco a resolverse.

En el acto han participado además numerosos concejales, tanto del equipo de Gobierno, del PP, como de los grupos de la oposición (PSOE y Vox).

Al finalizar el acto, han acudido a la zona media docena de familiares de Martha Hernández y sus hijos Sergio Silva y Eric Torres, todos ellos fallecidos la noche del incendio, en la que celebraban el cumpleaños de Eric.

Además de a estos tres familiares directos, estas personas perdieron también en el siniestro a la pareja de Eric y otros dos amigos muy cercanos, y han acudido al lugar del homenaje con camisetas con fotografías de sus seres queridos pidiendo justicia para ellos.

Ivania Teresa Silva, hija y hermana de los fallecidos, ha querido dejar claro que han acudido “en forma de protesta” y en busca de respuestas sobre la tragedia.

“Esa discoteca debía haber estado cerrada y no tomaron medidas hasta ahora”, ha lamentado, y ha subrayado que los afectados no han recibido ningún tipo de ayuda, ni siquiera información o comunicación de las administraciones.

“Una placa no me va a regresar a mi familia”, ha insistido antes de volver a pedir justicia, como también ha hecho brevemente antes de abandonar el homenaje Rafael Miranda, que perdió a su hijo Rafael y que ha pedido que los culpables de la tragedia den la cara y remedien lo sucedido.

Familiares y víctimas supervivientes del incendio llevaron a cabo ayer otro acto, sin representación institucional, a las puertas del Ayuntamiento, en el que ya manifestaron que no tenían intención de acudir al homenaje celebrado hoy por el descontento generalizado con la administración pública, por la que dicen sentirse abandonados y sin haber recibido ningún tipo de ayuda o apoyo después de los días que siguieron al incendio. EFE

vv/bc/bal

(foto) (vídeo)

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