Sevilla, 30 sep (EFE).- El Sevilla comenzó este lunes la preparación del derbi del domingo contra el Betis, en el Ramón Sánchez-Pizjuán, con un evidente subidón anímico y mejores sensaciones, tras puntuar 'in extremis' en un feudo tan exigente como San Mamés (1-1), pero con los pies en el suelo ante un duelo siempre especial como el de máxima rivalidad sevillana.
La plantilla sevillista, tras dar la cara en el estadio del Athletic Club y encontrar finalmente el premio a su lucha y su valentía en el desarrollo del partido con el gol en propia puerta del joven meta hispanomexicano Álex Padilla en el minuto 93, volvió este lunes al trabajo con la tradicional sesión de recuperación posterior a un encuentro.
El técnico Xavi García Pimienta, inusualmente renovado la pasada semana por un año más, hasta 2027, en una propuesta recibida cuando aún no había ganado ningún partido (justo antes de vencer por 1-0 al Getafe hace cuatro jornadas), ha dado el martes de descanso a sus jugadores para centrarse desde el miércoles en el derbi sevillano y pulir detalles para una cita marcada en rojo por las aficiones de los eternos rivales.
Tras el oxígeno que ha supuesto el 1-1 en Bilbao para disipar las dudas que, por la limitada economía del club y la consiguiente bajada de nivel en la plantilla, se cernían en torno al equipo, y que aún pululan en una parte importante del sevillismo, en el regreso al trabajo se han visto caras de satisfacción por el buen e inesperado, a priori, resultado de San Mamés.
Los futbolistas del Sevilla, decimotercero con 9 puntos tras sumar 7 de los últimos 12 posibles (2 triunfos, 1 derrota y 1 empate ayer), hicieron pasar por el típico pasillo de collejas al hispanocolombiano Mateo Mejía por su debut en Primera y con el primer equipo, en un choque en el que el delantero del filial fue, además, protagonista de la reacción final del cuadro hispalense.
Así, a los dos minutos de sustituir en el 80 a Gerard Fernández 'Peque', el atacante nacido en Zaragoza propició la expulsión del meta del Athletic Julen Agirrezabala, al arrebatarle el balón y ser derribado por éste cortando una posible jugada de gol, lo que finalmente contribuyó a que el Sevilla, tras una buena acción por la izquierda del nigeriano Chidera Ejuke, igualara con el tanto en su propia portería de Álex Padilla.
El primer entrenamiento de esta semana especial en la Ciudad Deportiva José Ramón Cisneros Palacios ha vuelto a contar con la participación del mediocentro belga Sambi Lokonga, que no fue citado para Bilbao al estar recién salido de una lesión de isquiotibiales que lo ha tenido de baja tres semanas, aunque parece que podría estar apto para el derbi.
También estará de nuevo disponible para García Pimienta el central brasileño Marcao Teixeira, ausente por sanción en la capital vizcaína por su expulsión en el último partido en casa ante el Valladolid (2-1), en el que reapareció, con una máscara protectora en la cara, tras perderse el de la derrota frente al Alavés (2-1) al fracturarse la nariz contra el Getafe.
Otro futbolista al que el entorno del Sevilla espera aún con más ansia para el derbi es el delantero canterano Isaac Romero, que se ha convertido en referente del ataque del equipo del barrio de Nervión por su facilidad rematadora y su fuerza y empuje a la hora de presionar.
El lebrijano lleva dos partidos de baja por el esguince de tobillo que sufrió en Vitoria, pero se prevé que esté listo para la visita del Betis al Sánchez-Pizjuán, mientras que son bajas seguras los centrocampistas Saúl Ñíguez y el suizo Djibril Sow, quienes continúan con sus procesos de recuperación de sendas lesiones de más largo alcance. EFE.