Este lunes comienza el juicio contra los acusados de matar a un hombre en Cartagena en 2019 durante una transacción de drogas con la que pretendían robarle hasta 34.000 euros. Será ante el Tribunal del Jurado en la Sala 1 de la sección tercera de la Audiencia Provincial de Murcia, a partir de las 10.30 horas. El fiscal acusa a tres de ellos, A.V.G, J.M.G.M., I.P.G, de un delito de asesinato y robo con violencia, y a los otros tres, R.R.T, L.J.R.T y O.F, de un delito de encubrimiento. El acusado A.V.G se vino ganando la confianza del fallecido J.A.M.F., desde principios del año 2019, comenzando una relación comercial de compraventa de sustancia estupefacientes. La víctima, con residencia en Moratalla, acudía para adquirir dichas sustancias al domicilio del acusado en Pinoso (Alicante). En concreto, la víctima acudió hasta en ocho ocasiones, por lo que acudía solo y confiado, dado que le daba tranquilidad el resto de las transacciones ya realizadas durante ese año. Tras ganarse su confianza los tres acusados de asesinato acordaron previamente acabar con la vida de la víctima, a la cual esperaron en el domicilio de A.V.G, al que iba a acudir en la tarde del 20 de junio de 2019, portando gran cantidad de dinero en efectivo, concretamente 34.000 euros, para comprar un kilogramo de cocaína. Los tres acusados pretendían sustraerle más fácilmente los 34.000 euros y evitar que éste pudiera denunciarlos. Al acusado I.P. le fue propuesto participar en estos hechos pagándole 1.000 euros por ello. Cuando la víctima llegó al domicilio del acusado el 20 de junio de 2019, en el interior del mismo lo estaban esperando los otros dos acusados de asesinado. Una vez en el interior del domicilio se abalanzaron sobre la víctima y mientras uno lo tenía inmovilizado el otro lo estranguló. A continuación, el acusado A.V. cogió la bolsa donde el finado llevaba los 34.000 euros y de ese dinero le entregó 1.000 euros al acusado I.P., repartiéndose el dinero restante con J.M.G. Los tres acusados alcanzaron plena disponibilidad del dinero sustraído, el cual no ha podido ser recuperado. Seguidamente, envolvieron el cadáver, lo introdujeron en un vehículo pequeño de color gris y se desplazaron hasta una finca con casa de campo que uno de ellos tenía alquilada y que se encontraba en las afueras de la localidad de Pinoso. El cadáver lo llevaron a una piscina que estaba vacía, donde quemaron la ropa del cadávez. Después, lo envolvieron en una lona. A la mañana siguiente los acusados J.M.G.M e I.P. lo trasladaron en un vehículo a la Sierra del Carche, en Yecla, lugar donde lo enterraron. Los hermanos R.R.T. y L.J.R.T., los cuales tenían conocimiento de los anteriores delitos pero no habían intervenido en los mismos, llevaron a cabo diversas actuaciones dirigidas a evitar su descubrimiento por la policía, actuaciones por las que el acusado A.V.G. les abonó diversas cantidades de dinero. Éstos guardaron el vehículo de la víctima, marca Audi, y les pidió más tarde que lo trocearan con una radial, puesto que habían comenzado a buscarlo. El coche quedó totalmente despiezado y tapiado en una cueva. Un sexto acusado, O.F., que tenía conocimiento de los anteriores delitos pero no había intervenido en los mismos, llevó a cabo diversas actuaciones dirigidas a evitar su descubrimiento por la policía. José Alonso Marín Fernández nació el 6 de octubre de 1983 y tenía 35 años cuando murió. El cadáver de José Alonso Marín Fernández no fue localizado por la Policía Nacional hasta el 8 de noviembre de 2020. Por estos hechos, el ministerio fiscal pide para los tres primeros acusados, A.V.G, J.M.G.M., I.P.G, por los delitos de asesinato y robo con violencia pide para cada uno 30 años, lo que suma un total de 90 años de privación de libertad. Asimismo, para R.R.T, L.J.R.T y O.F, acusados de encubrimiento, el fiscal pide para cada uno de ellos tres años de prisión. Igualmente, los tres primeros indemnizarán conjunta y solidariamente a la hermana del fallecido, por los daños morales ocasionados, en la cantidad de 50.000 euros, así como a la madre en la cantidad de 150.000 euros y por el dinero sustraído a su hijo en la cantidad de 34.000 euros. Los tres últimos también indemnizarán conjunta y solidariamente a la madre del finado, por los desperfectos ocasionados a su vehículo, en la cantidad de 33.000 euros.