Barcelona, 27 sep (EFE).- El Barça viaja a El Cairo con el objetivo de levantar de una vez por todas su sexto Mundial de Clubes (antes Super Globe), único título que no pudo añadir a sus vitrinas la temporada pasada y que se le escapa a su entrenador, Carlos Ortega, desde que aterrizó en la capital catalana hace tres años.
Desde la llegada del técnico malagueño, los azulgranas cayeron en 2021 y 2022 en la final ante el Magdeburgo alemán, presente también en esta edición, y el curso pasado en semifinales frente al Füchse Berlin teutón, tres años que el equipo catalán quiere dejar atrás para coronarse de nuevo como mejor club del mundo.
Tiene la oportunidad de hacerlo en Egipto, país que no acogía esta competición desde 2007 y que toma el relevo de Arabia Saudí, anfitrión de las últimas cinco ediciones, para albergar la competición del 27 de septiembre al 3 de octubre
El Barça recupera además, para la gran cita a su capitán y estrella, Dika Mem, ya reestablecido de la subluxación en el hombro derecho que sufrió contra el Pick Szeged, y Juan Palomino, mientras que siguen de baja Hampus Wanne y los lesionados de larga duración Pol Valera y Jaime Gallego.
Repite presencia en la convocatoria azulgrana Manuel Ortega, hijo del entrenador y que está teniendo un inicio de temporada muy positivo con el primer equipo.
Desde la lesión de Mem, el equipo venció en los dos duelos posteriores, ante el Bidasoa (30-36) y el Kielce polaco (28-32), en ambas ocasiones liderados por el lateral derecho Melvyn Richarson y el central Petar Cikusa.
A ellos tres, junto al dúo de porteros formado por Gonzalo Pérez de Vargas y Emil Nielsen, se encomendarán los azulgranas para levantar por sexta vez el Mundial de Clubes y romper finalmente la maldición de Carlos Ortega.
Este año, habrá un formato nuevo, compuesto por tres grupos y nueve clubes procedentes de cinco continentes, de los que pasarán a la semifinal los tres primeros y el mejor segundo.
En el Grupo A, se encuentran el Veszprém húngaro, invitado por la Federación Internacional de Balonmano (IHF) y rival a priori más duro del campeonato junto con el Magdeburgo, el Zamalek egipcio y el Taubaté brasileño.
Los húngaros, comandados por el exentrenador azulgrana Xavi Pascual, llegan a la competición con el mal sabor de boca de su última derrota en 'Champions' frente al Sporting de Portugal (39-30), un duro varapalo antes de afrontar el Mundial de Clubes.
El Barça, campeón de Europa y con un inicio de temporada prácticamente inmejorable, es el claro favorito del Grupo B, en el que también están el Al Ahly egipcio, campeón de la 'Champions' africana, y el Sydney Uni australiano.
Los catalanes, que ya han levantado la Supercopa de Cataluña y la Supercopa Ibérica y que permanecen invictos en la Liga Asobal y en la Liga de Campeones, se verán las caras primero con el Sydney Uni este sábado (19:00) y el domingo con el Al Ahly (19:00).
Y en el Grupo C competirán el Magdeburgo, otro de los favoritos tras erigirse como campeón en las tres pasadas ediciones, el Khaleej saudí y el California Eagles estadounidense.
Sin embargo, los germanos llegan con muy malas sensaciones tras haber sumado tres derrotas y un empate en los siete partidos que llevan disputados esta temporada. EFE
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