Huesca, 26 sep (EFE).- El Huesca, que ha empezado muy bien la temporada ganando cuatro de los seis partidos disputados hasta la fecha, afronta este próximo sábado un encuentro fuera de casa ante un rival directo, el Mirandés, pero con la tranquilidad que le dan los doce puntos que tiene en la clasificación, algo que ha destacado el entrenador Antonio Hidalgo.
"Vamos a Miranda con la tranquilidad que nos da la tabla pero con ambición de sumar los tres puntos, como en cada semana, y poder llegar cuanto antes al objetivo de la salvación y distanciar al rival", ha comentado Antonio Hidalgo en la rueda de prensa previa al partido ante el Mirandés en Anduva.
Ha añadido que esta semana, tras la victoria, se ha trabajado mejor, aunque el equipo, ha dicho, tiene "margen de mejora, tanto en defensa como con la pelota. Aunque esto va de ganar", ha enfatizado.
El buen puesto actual en la clasificación se debe, según el entrenador del conjunto oscense, a que este año tienen "más variantes y más pegada".
Ha asegurado que son diferentes en la construcción y esa variedad les da más posibilidades para afrontar los partidos sabiendo, siempre sabiendo quienes son y de donde vienen.
Hidalgo también ha dicho que los partidos "son sensaciones" y que el equipo tiene que tener tranquilidad para afrontar cada partido y saber qué hay que hacer en cada momento, ha señalado el técnico del Huesca.
Sobre el Mirandés, Antonio Hidalgo ha destacado su solidez en defensa y su peligro en la delantera.
"Es un rival directo, sólido y que concede poco y habrá que estar muy pendientes de los jugadores de arriba, ya que Panichelli e Izeta son dos amenazas constantes y además se hacen fuertes desde la defensa", ha analizado. EFE
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