Más de 40 personas testificarán en el juicio por el crimen de Samuel Luiz, el joven de 24 años que falleció en la madrugada del 3 de julio de 2021 tras recibir una paliza en el paseo marítimo de Coruña. Así lo ha informado el Tribunal Superior de Xustiza de Galicia (TSXG) al detallar cómo se celebrará y su duración. Será entre el 16 de octubre y el 18 de noviembre en la Audiencia Provincial de A Coruña, según comunicó ya con anterioridad la magistrada presidenta en un auto. A los miembros del jurado popular, cuya selección se realizará el día 15, se le plantearán 87 cuestiones a las que deberán dar respuesta. A ellas, se suman otras siete sobre el grado de ejecución del delito y la participación de los cinco acusados. Otros dos menores en el momento de los hechos ya fueron condenados. El juicio, con sesiones que comenzarán a las 9.45 horas y que se celebrarán, durante ese periodo, todos los días, de lunes a viernes, en horario de mañana, comenzará con los informes y cuestiones previas el día 16. El 17 de octubre declararán dos de los cinco acusados, A.M.R. y C.S.B, la única mujer que se sentará en el banquillo de los procesados. El inicio de las testificales será también ese día con dos amigos de la víctima presentes en el lugar y los ciudadanos senegaleses que trataron de auxiliar a Samuel. Luego continuará el juicio con testificales y otras pruebas hasta que el 14 de noviembre tenga lugar la declaración de los tres acusados que han optado por hacerlo al final: D.M.M., A.F.G y K.A.S.C. El día 15 de noviembre tendrá lugar la lectura de los informes finales con posibilidad de tomar la última palabra los acusados y luego comenzará el proceso para el veredicto. VEREDICTO El jurado popular decidirá si los hechos descritos constituyen un delito de asesinato, como sostienen las acusaciones, además de un posible delito de robo con violencia por la presunta sustracción del móvil de la víctima que se atribuyó en la investigación a uno de los acusados. En cuanto a las circunstancias agravantes, deberá determinar si dos de los acusados (D.M.M. y C.S.B.) ejecutaron los hechos relatados "por causa de su animadversión hacia la orientación sexual homosexual que le atribuyeron a la víctima", recoge el auto de la magistrada. Y es que en su caso, junto al delito de asesinato con alevosía y ensañamiento que se pide para todos -- a uno de los procesados se le suma también el delito de robo del móvil de Samuel--, se les imputa la agravante de discriminación por condición sexual. Junto a las defensas, en el juicio están personadas la familia y la acusación popular, ejercida por el colectivo LGTBI Alas Coruña, además de Fiscalía, que solicita 25 años de prisión para los dos primeros procesados y 22 años para los otros tres por delito de asesinato. Para uno de los acusados, solicita también cinco años de prisión por el delito de robo con violencia, por lo que para él las penas suman 27 años de cárcel. Como circunstancias eximentes y/o atenuantes, la magistrada presidenta señaló en su auto que ha de establecerse, a través de las pruebas presentadas en la vista, si tres de los procesados, debido a la previa ingesta de bebidas alcohólicas o de drogas, se encontraban en estado de intoxicación, dando lugar "a alguna situación de alteración, disminución o eliminación de su capacidad para formar su voluntad y comprender el alcance de sus actos".