Madrid, 25 sep (EFE).- Grupos ecologistas españoles han coincidido este miércoles en que el trámite de la Unión Europea para rebajar la protección al lobo carece del "fundamento científico" en el que "deben apoyarse" los representantes europeos y se basa en la presión política de la derecha europea.
La decisión de la Comisión debe adoptarse formalmente en la reunión de mañana del Consejo de Europa, pero deberá pasar una votación en diciembre próximo, en la última votación del Convenio de Berna o Convenio relativo a la conservación de la Vida Silvestre y del Medio Natural en Europa.
Los ecologistas han coincidido en que si llega a fraguarse la propuesta incumpliría compromisos internacionales, como el Marco Mundial de Biodiversidad de Kunming-Montreal, que fue aprobado durante la Conferencia de las Partes del Convenio sobre Diversidad Biológica en diciembre de 2022.
Asimismo, han señalado que sería cuestionable y una "pérdida de credibilidad" que Europa adopte esta posición a pocos días del inicio de la Conferencia de las Partes del Convenio sobre Diversidad Biológica que se celebrará este año en Cali (Colombia), la COP16.
En declaraciones a EFE, Theo Oberhuber, coordinador general de Ecologistas en Acción (EA), ha subrayado que "no es una decisión en firme hasta diciembre próximo y tendrá que pasar por una votación", pero responde "a ciertos intereses políticos, sin base científica que la justifique".
Según Oberhuber, "sería un precedente muy grave" y representaría un "retroceso injustificable", porque estaría incumpliendo la propia normativa europea sobre protección de biodiversidad y de Hábitats en cuanto a la adopción de medidas basadas en conocimientos científicos, por lo que prefiere esperar a ver el recorrido que tendrá el trámite.
No obstante, ha subrayado que es una medida que a España "no tiene que afectarle, porque ya cuenta con su propia normativa, su propia estrategia de conservación del lobo", una especie con una población que se encuentra en "un estado desfavorable", y con un "censo poblacional que data de 2019".
Luis Miguel Domínguez, presidente del movimiento Lobo Marley, ha lamentado que sen den pasos atrás en la protección de la biodiversidad y ha dicho que la democracia, en general, ha dejado "rendijas por las que se ha colado la derecha europea, que le ha dado la espalda al lobo", y a una ciudadanía que "tiene todo el derecho del mundo a disfrutar de su biodiversidad totalmente protegida y conservada".
El aspecto positivo, ha asegurado Domínguez, es que "España ha sido firme con respecto a mantener el estatus de conservación y de protección del lobo"y ha añadido que la Unión Europea hoy ha votado "a favor de cuidar lo privado que es la ganadería y la caza, intereses absolutamente privados que estarán hoy aplaudiendo".
Desde WWF, el secretario general Juan Carlos del Olmo, rechaza la propuesta, porque es "grave retroceso en la conservación de la biodiversidad", una especie que está "estrictamente protegido" por el Convenio de Berna y la Directiva de Hábitats de la UE, contradice a la ciencia y socava décadas de esfuerzos de conservación.
Ha asegurado que "se trata de una decisión vergonzosa, donde la Comisión Europea ha cedido a las presiones de los partidos y sectores más reaccionarios de Europa", y ha agradecido que gobiernos como el de España y otros se hayan opuesto y se mantengan firmes en su compromiso con la protección de "esta especie aún amenazada”.
El coordinador de Alianza Verde, Juantxo López de Uralde, ha lamentado que "la propuesta de la presidenta Úrsula Von Der Leyen carece de cualquier soporte científico, y sólo se basa en criterios políticos apoyados en las derechas populistas".
Ha informado que este martes registraron en el Congreso de los Diputados una petición al Gobierno de España para que "medie ante el resto de países y garantice que el lobo continúe siendo una especie protegida en todo el continente". EFE
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