Marina Estévez Torreblanca
San Sebastián, 23 sep (EFE).- Leos Carax ha dado este lunes una sorpresa a quienes han aguardado al final de los títulos de crédito de su película 'C'est pas moi' ('No soy yo'), al aparecer ante la pantalla e iniciar un diálogo con los espectadores en el que ha reconocido que "el cine ha perdonado muchísimo a los hombres".
"Me parece, también en mis películas, que el cine perdona mucho a los personajes masculinos", ha dicho el director de cine, que ha presentado en el festival de San Sebastián, fuera de concurso, en la sección Zabaltegi Tabakalera, un mediometraje experimental en el que revisa en forma autorreferencial más de cuarenta años de filmografía.
Carax (Suresnes, Francia, 1960) ha presentado en el festival de San Sebastián, en la sección Zabaltegi Tabakalera, un mediometraje experimental en el que revisa en forma de autorretrato más de 40 años de filmografía, cuestiona las principales etapas de su vida, y captura los temores políticos de la época.
Imágenes duras de dictadores como Hitler o tan dramáticas como la del niño sirio de tres años Aylan Kurdi, ahogado mientras trataba de escapar de la guerra. También una sucesión de imágenes de la evolución del también cineasta Roman Polanski, que acaban con la declaración de que violó a una niña.
Preguntado en el debate posterior, Carax ha afirmado que simplemente trataba de mostrar a Polanski, a quien no conoce personalmente, pero que no quiere ni actuar de abogado ni tampoco juzgarle. "Y tampoco entiendo muy bien que tenga que haber siempre bandos, unos que lo atacan fervientemente y otros que lo defienden", ha dicho.
Lo que sí ha querido dejar claro en este contexto es que "está bien que vivamos cada uno en nuestro tiempo, pero sin tampoco perder demasiado de vista por lo menos el siglo anterior que nos ha precedido, y teniendo también la vista un poco hacia delante".
"Yo soy alguien que nació en el siglo XX y tengo una identidad que está asociada al siglo XX. Mi hija, por ejemplo, me considera alguien de otro mundo", ha señalado el autor de 'Mala sangre' (1986), 'Los amantes del Pont-Neuf' (1991) o 'Annette' (2021). Tras admitir que nunca ha hecho una película con una mujer en el centro, ha señalado que quiere intentarlo, aunque no sabe si podría hacerlo.
Del mediometraje que ahora presenta, ha explicado que el origen de la película es un encargo de un museo en París, cuyo nombre no ha dicho, de un cortometraje de una duración de unos 10 minutos, que fuese su autorretrato, para una exposición que no llegó a realizarse.
"En la realización de esta película pasé muchísimo tiempo solo y yo mismo he querido hacer el montaje. Por la noche me venían a la mente imágenes que durante el día recuperaba o filmaba y las iba incorporando", ha afirmado.
Su visión en el filme es la de "un niño que no es capaz de entender cómo puede haber esa maldad o ese nivel de violencia", y que se pregunta "¿Pero cómo hemos podido permitir que esto suceda?".
Los 40 minutos de película están acompañados de una banda sonora con canciones de David Bowie o Nina Simone que Carax ha definido como "un acto de gratitud".
"Se trata de músicas que me han acompañado a lo largo de toda mi vida. Quiero darles las gracias por haberme acompañado a lo largo de los años", ha dicho Carax, que ha reconocido que a él le habría encantado ser músico, tener voz y cantar o componer.
Un amor por la música que ha usado para responder con un 'God only knows' (solo Dios lo sabe, la canción de los Beach Boys) a la pregunta de cuándo estrenará su próxima película. EFE
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