El calentamiento global podría agotar la capacidad de adaptación de ciertos insectos

Guardar

Nuevo

Barcelona, 13 sep (EFE).- Investigadores de la Universidad Autónoma de Barcelona (UAB) han observado a través del estudio de variación genética de la mosca europea Drosophila subobscura, una especie reconocida por su adaptación a los cambios, que esta capacidad evolutiva podría agotarse ante el rápido incremento de la temperaturas globales.

Los investigadores del Departamento de Genética y de Microbiología de la UAB Francisco Rodríguez-Trelles Astruga y Rosa Tarrío Fernández han estudiado las variaciones genéticas de la especie, mucho más pequeña que la mosca doméstica y común en los bosques de Europa.

La investigación se inició el 2015 y durante cuatro años se han tomado muestras en Viena (Austria), Lovaina (Bélgica), Lagrasse, Montpellier y Villars (Francia), Tubingen (Alemania), Groningen (Países Bajos), Leuk (Suiza), Málaga, Punta Umbría (Huelva), Riba-roja de Túria (Valencia) y Queralbs (Girona).

Los resultados, publicados en Nature Climate Change, corroboran en las muestras analizadas que la proporción de mutaciones genéticas que favorecen la tolerancia al calor aumentaba y la de las que favorecen la tolerancia al frío disminuía.

El estudio muestra cómo esta pauta se ha acelerado durante las dos últimas décadas en la Europa templada respecto de la mediterránea a un ritmo sin precedentes, siguiendo la incidencia de unas olas de calor cada vez más largas e intensas.

Las proyecciones indican que, si no se hace un esfuerzo más grande para detener el calentamiento global, las poblaciones centroeuropeas actuales de esta especie se habrán vuelto genéticamente indistinguibles de las del sur de Europa alrededor de los años 2050.

Para el profesor Francisco Rodríguez-Telles, que coordina el programa de doctorado en Genética de la UAB “esto sería inaudito, puesto que es una especie modelo que en los libros de texto aparece como ejemplo de cómo la variabilidad genética confiere adaptación al clima a diferentes latitudes”.

Los investigadores no han detectado que hayan surgido nuevas mutaciones que confieran más adaptación al calor que las ya existentes, lo cual implica que el ritmo de aparición de nuevas mutaciones es demasiado lento para acompañar el del aumento de la temperatura.

Esta perspectiva es particularmente alarmante si se tiene en cuenta que un número elevado de especies de insectos están peor dotadas para adaptarse evolutivamente al calentamiento global que Drosophila subobscura.

Según las previsiones científicas, el calentamiento global de origen humano continúa agravándose y las consecuencias adversas se acumulan.

Cuando el aumento de la temperatura excede la capacidad de aclimatación de algunos individuos y no hay refugios térmicos, la supervivencia de la especie depende de los individuos genéticamente más tolerantes y se desencadena la evolución, que es el mecanismo de respuesta analizado en este estudio. EFE

jg/rq/cc

Guardar

Nuevo

Últimas Noticias