"Eres una exagerada": anatomía de la falta de perspectiva de género en la atención médica

Barcelona, 12 sep (EFE).- La periodista Isabel Muntané y la doctora Blanca Coll-Vinent, con la colaboración de los cuatros grandes hospitales catalanes, han presentado el libro "Ets una exagerada" ("Eres una exagerada"), editado por Raig Verd, en el que repasan las principales carencias en perspectiva de género en la medicina por la falta de concienciación y de investigación específica.

De la violencia obstétrica a la mayor mortalidad de enfermedades cardíacas en mujeres, las intoxicaciones farmacológicas con frecuencia a las pacientes o la infrainvestigación que lleva a que la mortalidad haya disminuido en todos los tipos de cáncer menos en el de útero y de mama son algunos de los ejemplos explicados a través de testimonios personales y también por profesionales de la salud.

El título, "Eres una exagerada: sesgo de género y sexo en la salud", hace referencia precisamente a la "invisibilidad" y "menosprecio" a los dolores o patologías que sufren y que se caricaturizan como "cosas de mujeres", y que explica, por ejemplo, que ante un infarto las mujeres lleguen al hospital de media 20 minutos más tarde que ellos, como ha explicado la doctora encargada del capítulo sobre isquemias coronarias, Mercè Roqué, del Clínic.

"La medicina androcéntrica genera violencia a personas que no encajan en esa figura de hombre paciente universal en torno al que se ha construido toda la investigación y atención al paciente", ha explicado Muntané.

La periodista, que ha conversado con pacientes que han sufrido esa falta de perspectiva de género en su propia salud, ha destacado que han querido dar cuenta de la situación con un estilo "divulgativo" que "llegue a todo el mundo" y, también, a las instituciones.

En el mismo sentido, la cocoordinadora del libro, la internista de urgencias del Hospital Clínic Blanca Coll-Vinent, ha destacado que hasta hace muy pocos años la concienciación sobre las carencias de una medicina que tenga en cuenta a la mujer era "nula".

"Se han ido creando comisiones de perspectiva de género en los hospitales, pero no podemos depender solo de que algunas estemos motivadas, debe dedicarse desde los gobiernos, desde las instituciones, más dinero y más recursos", ha defendido.

En la misma línea se ha pronunciado la cardióloga y presidenta de la comisión de perspectiva de género de Vall d'Hebron, Antonia Sambola, quien ha apuntado que es clave mejorar en investigación y formación, y que ha señalado en ese sentido que en su centro los residentes tendrán desde el año próximo una asignatura de género y salud.

También han colaborado las responsables del servicio de Obstetricia y Ginecología del Hospital Trias i Pujol y Sant Pau, Carmina Comas y Elisa Llurba, respectivamente, quienes han destacado que la violencia obstétrica es "la punta del iceberg del sesgo de género en la salud".

Comas ha reconocido que los propios compañeros de profesión no han recibido en muchos casos con agrado el debate público y el reconocimiento sobre la existencia de esa violencia obstétrica, porque "parece implicar cierta voluntariedad de hacer daño, que es contraria a la profesión médica en sí misma".

Llurba, por su parte, ha puesto en valor que gracias a las mujeres que han denunciado malas prácticas en momentos como el parto se ha avanzado en una mejor atención en los alumbramientos, poniendo en el centro los deseos de la madre y no priorizando únicamente cuestiones logísticas, por ejemplo, en las cesáreas. EFE

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