Marina García Polo espera "un cambio de dinámica positivo" con la nueva seleccionadora

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Sevilla, 5 sep (EFE).- La andaluza Marina García Polo, medallista de bronce con España en París 2024 en natación artística, se ha despedido "eternamente agradecida" de la seleccionadora nacional, la japonesa Mayuko Fujiki, y cree que su sucesión por "un mito como Andrea Fuentes" será "un cambio de dinámica positivo".

Marina García Polo ha vaticinado este jueves, en declaraciones a EFE, que espera "que haya novedades" en la forma de trabajar porque el nuevo equipo técnico viene a "innovar, cambiar un poco el chip y la mentalidad", así que tiene "muchas ganas de empezar esta nueva etapa" con la que está "bastante ilusionada".

La deportista sevillana ha explicado que "la última competición de la temporada 24-25 es el Mundial en Singapur" del próximo verano, donde España va "a montar nuevas coreografías con Andrea -Fuentes-, con el objetivo de enseñar una nueva imagen que guste incluso más que la que se acaba de dar" en París.

"Tenemos que empezar a trabajar un nuevo ciclo olímpico, aunque de aquí a cuatro años... Yo siempre digo de ir año a año porque nunca se sabe lo que va a pasar. Psicológicamente, ha sido un periodo intenso y creo que a partir de ahora debo apretar un poco más con los estudios", ha añadido Marina García Polo.

La nadadora del Sincro Sevilla quiso resaltar el "buen trabajo que se hace" en su club, donde también se ha formado otra medallista olímpica, Alisa Ozhogina, y destacó que es una entidad en la que "cuida muchísimo" a las deportistas, "es una familia y siempre van a intentar ayudarte. Esta medalla es gracias al club".

Marina García Polo relató que "solamente con ir a los Juegos ya habría estado más que satisfecha, pero sí que es verdad" que el equipo nacional "llevaba dos años con bastantes buenos resultados" y quería explotar la baza del "nuevo reglamento", con el que "es muy fácil estar arriba o estar abajo".

Para la deportista andaluza, "la clave" para subirse al podio "fue la mentalidad para no estar de bajón el tercer día" de competición, después de una segunda jornada "en la que fue un poquito peor. Físicamente, quedaba poca energía después de dos días bastante intensos, pero la cabeza tiró muchísimo y el corazón tiró aún más". EFE

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lhg/agr/jpd

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