Valencia, 4 sep (EFE).- El futbolista Rafa Mir, que esta temporada juega en el Valencia cedido por el Sevilla, ha pasado su segunda noche en el calabozo a la espera de pasar a disposición judicial tras haber sido detenido por dos presuntas agresiones sexual, algo que se espera que suceda esta miércoles.
Este domingo una joven de 21 años denunció haber sufrido una doble agresión sexual por parte del delantero murciano de 27 años en la casa en la que vive en la urbanización Torre En Conill en Bétera (Valencia). Además, otra mujer, de 25 años, denunció también por agresión a un amigo de Mir, que fue detenido este martes.
Según la denuncia de ambas jóvenes, los hechos habrían ocurrido en la noche del sábado al domingo, tras la disputa del encuentro entre el Valencia y el Villarreal cuando, tras conocerse en una discoteca, las dos denunciantes, Mir y un amigo se trasladaron a la casa del jugador del Valencia.
Tras salir del domicilio del futbolista a primera hora de la mañana del domingo, a la que acudió la Policía Local de Bétera alertada por un vecino que oyó gritos, las mujeres fueron atendidas en un centro hospitalario de Valencia y presentaron sendas denuncias ante la Guardia Civil, que el lunes detuvo a Mir.
El jugador no acudió al entrenamiento del Valencia este martes por la mañana al estar ya en las dependencias del instituto armado en el barrio de Patraix, donde ha pasado su segunda noche.
El Valencia emitió un comunicado este martes en el que se mostró conocedor de la detención, aunque dijo desconocer los "detalles" de la causa y se puso a disposición de la justicia.
Nacido en Cartagena (Murcia), Mir tiene 27 años, acabó su formación en el Valencia y en el mercado de invierno de 2018 fue traspasado al Wolverhampton. En 2021, fichó por el Sevilla, club con el que tiene contrato hasta junio de 2026 y que este verano cerró un acuerdo para que jugara a préstamo esta temporada en el club de Mestalla. EFE
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