0-2. El Girona celebra la primera victoria de la pretemporada

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Girona, 3 ago (EFE).- El Girona conquistó este sábado la primera victoria de la pretemporada al superar al Nápoles por un ajustado y merecido 0-2 en el municipio italiano de Castel di Sangro, con tantos de Donny van de Beek y Toni Villa para resolver el quinto test de preparación del equipo de Míchel Sánchez y el que fue el primer encuentro rojiblanco desde la venta de Artem Dovbyk a la Roma.

El Girona, tras tres empates y una derrota, jugó por tercera pretemporada consecutiva contra el Nápoles en Castel di Sangro y se impuso al conjunto de Antonio Conte en un duelo que sirvió para recuperar sensaciones. Fue el mejor amistoso del equipo, pese a las bajas de los lesionados Ladislav Krejci, Jhon Solís, Viktor Tsygankov y Gabriel Misehouy y los olímpicos Miguel Gutiérrrez y Abel Ruiz.

Desde el inicio del partido la iniciativa fue para el equipo catalán, de nuevo con muchos hombres en ataque y una apuesta muy ofensiva: un 3-3-3-1 en ataque que se convertía en un 4-2-3-1 en defensa aprovechando la inteligencia táctica de Arnau Martínez. Gazzaniga; Francés, David López, Blind; Iván Martín, Arnau, Yangel Herrera; Bryan Gil, Van de Beek, Valery; y Portu formaron el once.

La posesión rojiblanca era muy elevada, aunque resultaba estéril cuando el Girona llegaba a tres cuartos de campo y tenía que buscar espacios a la espalda de Stanislav Lobotka y Frank Zambo Anguissa.

El equipo acosaba cierta falta de frescura e ideas en ataque y no avisó hasta el minuto 17, con un tiro desde la frontal de Valery Fernández que se fue cerca del palo derecho de Alex Meret.

En el 23' el portero italiano cometió un error muy grave que supuso el 0-1: regaló la pelota a Van de Beek en el inicio de la jugada y el centrocampista neerlandés, fichado del Manchester United por 0,5 millones de euros, supo marcar pese a tener tres defensas por delante.

Fue el premio a la presión adelantada de Míchel y Van de Beek lo celebró con rabia, tras no poder brillar en sus dos primeros partidos como rojiblanco y después de temporadas difíciles. El jugador está llamado a ser uno de los líderes del cuadro de Montilivi en una temporada histórica por el estreno en la Liga de Campeones.

Respecto a la dura derrota del miércoles contra el Toulouse (0-4), en un partido marcado por la expulsión de Paulo Gazzaniga en la primera mitad, aún con 0-0, el Girona mejoró sobre todo en el aspecto defensivo. Se mostró muy sólido, con un Alejandro Francés muy protagonista en la construcción del juego, e impidió que Khvicha Kvaratskhelia y compañía pudieran crear ocasiones de peligro.

En ataque faltó algo de soltura, pero en el tramo final de la primera parte hizo méritos para ampliar su ventaja bajo la batuta de Arnau. Primero puso un buen centro hacia Yangel Herrera, en una jugada en la que el Girona pidió penalti por manos de un rival, después obligó a Meret a estirarse para desviar a córner un tiro desde la frontal y finalmente envió un gran balón filtrado al área para Portu.

El murciano, punta de circunstancias tras la venta de Dovbyk, disparó sin ángulo, pero arañó un córner bajo la tormenta. Quizás fueron los mejores 45 minutos del Girona hasta el momento.

La segunda mitad arrancó con un Girona igualmente intenso en la presión y con un remate de cabeza de Van de Beek a centro de Iván Martín. Respondió el Nápoles con una combinación entre Lobotka y Kvaratskhelia que acabó con un peligroso disparo de Anguissa desde la frontal del área rojiblanca. Gazzaniga voló para blocar su remate.

Poco después de la hora de juego Van de Beek y Valery cedieron su sitio a Iker Almena, joven del filial y uno de los nombres de la pretemporada hasta la fecha, y Cristhian Stuani. Y Almena apenas necesitó unos segundos sobre el verde para volver a impresionar. Asistió a Portu en una bella jugada colectiva nacida de las botas de Yangel Herrera, pero el disparo del murciano, tímido, topó con Meret.

Poco después entraron Juanpe Ramírez y Toni Villa por Yangel Herrera y Portu. Bryan Gil, creciente y más incisivo con el paso de los minutos, centró al área, y Leonardo Spinazzola quiso dejar la pelota para Meret con el pecho, pero su cesión se estrelló en el palo. En el 76' Conte dio la alternativa al español Rafa Marín, fichado del Real Madrid.

El Nápoles buscó dar un paso adelante en el tramo final y rozó el gol con un córner sacado por Kvaratskhelia que se paseó por el área y se fue cerrando y envenenando tras impactar en algún jugador hasta rebotar en el palo contrario. El Nápoles falló y el Girona acertó: en el minuto 82 Stuani envió un pase de la muerte al área pequeña y Toni Villa estiró la pierna para sentenciar el duelo con el 0-2.

El encuentro acabó con una gran parada de Gazzaniga en un uno contra uno ante Kvaratskhelia y con cuatro titulares sobre el campo: Gazzaniga, Francés, Daley Blind y de nuevo Iván Martín.

El Girona continuará y ya despedirá la pretemporada el fin de semana que viene con amistosos contra el Bournemouth y el Newcastle en suelo inglés, antes del debut liguero en casa del Betis. EFE

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asm/jl

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