Madrid, 30 jul (EFE).- Médicos de familia recibirán formación en la enfermedad de Lyme, una infección bacteriana transmitida por un tipo de garrapatas que, por sus síntomas, especialmente el dolor, suele confundirse con otras afecciones, lo cual lleva a un retraso del diagnóstico de más de 8 años.
La Fundación SOS Lyme ha acordado con la Sociedad Española de Médicos Generales y de Familia (SEMG) formar a sus socios en esta enfermedad, causada por la bacteria 'Borrelia burgdorferi', para ayudar en la detección de casos, que van en aumento debido a la proliferación de estos parásitos.
El dolor es el síntoma más común, por lo que suele ser confundida con otras enfermedades como fibromialgia o artritis reumatoide, lo que lleva a los pacientes a "deambular entre diferentes especialistas" y esperar más de 8 años en ser diagnosticados; por eso "se le llama la gran imitadora", ha explicado en una nota el doctor Mariano Bueno, presidente de la Fundación SOS Lyme.
Además, se requieren pruebas muy especializadas para detectarla, ya que las habituales con las que se diagnostican las infecciones son en el 85 % de los casos negativas por la inmunosupresión que padece el paciente.
Por eso, "es importante que el médico de Atención Primaria sepa detectar los síntomas de la enfermedad de Lyme a tiempo para evitar que se convierta en un Lyme crónico, que tiene consecuencias muy graves en la calidad de vida de los pacientes", ha añadido Julia María Ruiz, coordinadora del grupo de Salud Pública de SEMG.
El acuerdo alcanzado permitirá a estos facultativos actuar tanto en las primeras fases de la enfermedad, cuando se produce la infección, como en las más avanzadas, cuando se cronifican el dolor, la fatiga y la inflamación.
Una vez confirmado el diagnóstico y aportados los análisis de sangre seleccionados en cada caso por un médico experto, también es importante aplicar un tratamiento lo antes posible para que la enfermedad no avance y destruya o debilite el sistema inmune.
En muchos casos se puede llegar a curar, pero es un proceso largo que requiere de la combinación de diversos tratamientos. EFE
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