El aprendizaje alemán de Juan Núñez

Juan Manuel Sánchez

Berlín, 26 jul (EFE).-Juan Núñez, nuevo base del Barcelona, aterriza en las filas azulgranas tras completar dos años de un aprendizaje avanzado en una de las ligas más emergentes de Europa, la Bundesliga de baloncesto.

Durante este último bienio, su progresión le ha convertido en uno de los generadores de juego más pretendidos en el Viejo Continente. El Ratiopharm Ulm recibió del Real Madrid a una promesa de 18 años y le devuelve a su eterno rival un jugador recién drafteado en la NBA por una de las franquicias con mejor radar para la detección de talentos europeos, como es San Antonio Spurs.

Por el camino, al joven de Villaviciosa de Odón le ha dado tiempo a participar de manera decisiva en la mayor conquista en la historia del conjunto del sur de Alemania: la liga conquistada en 2023, primer título de la escuadra germana.

Sus promedios en su curso de debut en tierras teutonas, unos nada desdeñables 8,1 puntos y 4,2 asistencias por partido. En la Eurocopa, la segunda competición continental, en la que el Radiopharm llegó a cuartos de final, unos similares 7,6 puntos y 4,4 pases de canasta por encuentro.

Su contribución al éxito, unida a las bajas de Ricky Rubio y Lorenzo Brown, lo propulsó a que Sergio Scariolo lo convocara para el pasado Mundial disputado en Japón, Filipinas e Indonesia, en el que, a pesar del decepcionante resultado de España, dejó varias muestras del amplio repertorio que maneja Núñez en sus hábiles manos y del que pudieron disfrutar futuros compañeros como Willy Hernángomez, Álex Abrines, Darío Brizuela o Joel Parra.

Y es que a su ya privilegiada visión de juego para proyectar los pases más imprevisibles, de la cual ya fue víctima precisamente la estrella de los Spurs, Victor Wembanyama, en una final de un Europeo sub-16 que conquistó España, le ha añadido una más que sólida disposición defensiva, una mejora en la lectura de las situaciones de ataque en estático y un mayor ímpetu a la hora de atacar la canasta en penetración. En su debe, sigue necesitando perfeccionar el lanzamiento de larga distancia.

En esta última campaña, sus prestaciones individuales han sido todavía mejores. 9,4 puntos y 4,6 rebotes en una Bundesliga en las que el Radiopharm no pudo repetir triunfo y se quedó en cuartos de final.

Núñez lideró al conjunto del sur alemán hasta la final de Copa, en la que, a pesar de su destacada actuación, con 17 puntos en la final, sucumbió ante el Bayern Múnich de Pablo Laso.

La mejor versión del base español llegaría en Europa. De nuevo en el segundo torneo continental, el entrenador de los germanos, Anton Gavel -exjugador del Murcia en sus tiempos de corto-, explotó al máximo las cualidades del madrileño, dejando unos 10,8 tantos, 5,7 asistencias y 15,4 créditos de valoración de media en los 15 encuentros disputados, 14 de ellos como titular.

Su mejor actuación llegó curiosamente ante un conjunto español. En la undécima jornada de la fase regular, el Gran Canaria sufrió en sus carnes todo el caudal ofensivo que Núñez puede ofrecer en un espectacular 103-99 para los germanos decidido tras prórroga. El canterano blanco se fue hasta los 17 puntos y 26 créditos de valoración con un casi impoluto 6 de 7 en tiros de dos, la mayor parte de ellos, con penetraciones imparables a canasta.

Ahora, tras haberse quedado en fuera en última instancia de la convocatoria de Scariolo para los Juegos de París, Juan Núñez afronta el mayor reto de su aún corta carrera, en el que se espera que tenga un importante peso específico tras la salida de Rokas Jokubaitis, la irregular campaña de Satoransky y el previsible paso de Laprovittola al puesto de escolta.

Así, le toca asumir las riendas de uno de los conjuntos más grandes de Europa, en horas bajas tras una temporada sin títulos, y con un proyecto nuevo que también estrena entrenador. Puede que del uso que haga Joan Peñarroya del joven base pasen las posibilidades de que el Barcelona retorne a la senda de los títulos. EFE.

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