Canco Rodríguez aparca su "miedo " a los clásicos en "Los bandos de Verona"

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Inés Morencia

Valladolid, 25 jul (EFE).- El actor Juanjo "Canco" Rodríguez ha aparcado su "miedo" a los clásicos con Francisco de Rojas Zorrilla y su obra "Los bandos de Verona", que este viernes se representará en el festival "Olmedo Clásico", al que también acude por primera vez, "con muchas ganas e ilusión".

En entrevista con EFE, el intérprete malagueño, que dio vida a "El barajas" en la serie "Aída" durante diez temporadas, ha dado un paso más en su trayectoria profesional y ha aparcado el "miedo" que sentía hacia los clásicos para descubrir un género que le ha aportado "un gran placer".

Según ha explicado, cuando le llegó el texto de Francisco de Rojas Zorrilla, pensó que cómo iba a interpretar un personaje de teatro clásico, cuando a él no le gustaba, pero la realidad es que era "un ignorante", que no había querido acercarse a un mundo que desconocía por completo.

"Leí la obra y me reí mucho, y antes de terminarla, ya sabía que quería hacerla. Y ha sido un regalo, porque es una adaptación que acerca el teatro clásico al público, que satisface a los puristas pero también a los que creen que no tienen paladar para disfrutar estas funciones o que temen no entender un texto en verso", ha comentado.

Ha explicado que es consciente de que va a interpretarla en Olmedo, donde el público sí conoce a los clásicos y disfruta con ellos, por lo que está deseando poder estar en el certamen y demostrar que "defiende bien" su personaje y que transmite esa energía y pasión que imprime a todo lo que hace.

En "Los bandos de Verona", "la gente va a encontrar una obra muy divertida, disparatada, dinámica, cuya trama ya conoce bien, puesto que es una versión de 'Romeo y Julieta', con un montaje fresco y dirigido por Daniel Alonso de Santos", que repite en Olmedo tras "La monja alférez".

A título personal, este trabajo le ha "abierto una puerta al placer" y, profesionalmente, le ha permitido "tomar conciencia del nivel actoral que hay en este país" y despertarle las ganas de seguir conociendo el teatro clásico, para lo que va a formarse de manera más especializada.

De hecho, aunque no había hallado esa conexión con los clásicos, en su cabeza siempre ha tenido un personaje, Segismundo, de "La vida es sueño", de Calderón de la Barca "y si alguien provoca ese deseo por conocerlo, cuando ya comprendes de verdad lo que hay detrás, se convierte en un disfrute total".

"El teatro clásico no aburre. Es que muchas veces no se entiende, y esta obra es una buena forma de iniciarse como espectador del mismo", ha añadido el actor andaluz, quien confía en poder tener la oportunidad de participar en más obras clásicas, porque se ha "enamorado" del verso.

Aunque está acostumbrado a hacer comedia, le gusta, y se siente cómodo en ese apartado, tiene la esperanza de poder interpretar algún papel dramático pero, mientras llega, se saca la espina produciendo sus propios espectáculos, como "El rock and roll no ha muerto" o "Yo no soy gracioso".

El actor ha explicado que ahora afronta su papel más importante, el de padre, con su hijo Hiro, y por eso trata de amoldar su agenda y recortar tiempo de trabajo para pasar el mayor tiempo posible con él, "porque es el momento de hacerlo, antes de que crezca, siga su propio camino y ya no pueda verle tanto".

"Yo busco la felicidad, y está ahí. Es adictivo, como una droga, y la quiero disfrutar todo lo que pueda", ha advertido Canco Rodríguez, quien se considera un "tipo con suerte", ya que siempre ha contado con el apoyo de su familia, incluso cuando aparcó Periodismo en tercero para irse a la escuela de Cristina Rota y convertirse en actor.

El actor sostiene que el tiempo le ha dado la oportunidad de reconciliarse con ese personaje que tanto le ha marcado, y con el que llegó a tener un serio conflicto al terminarse "Aída", ya que solo le ofrecían roles parecidos en los casting, pero ahora lo abraza, agradece lo que le dio y está en paz.

No le faltan proyectos y, si bien suelen seguir vinculados a la comedia, tanto en teatro como en cine o televisión, está "encantado" de tenerlos, como su último trabajo en "Hotel Bitcoin", que se estrenará próximamente, o la participación en series como "Atasco" o "Serrines, madera de actor".

Este viernes se estrenará en "Olmedo Clásico" con una obra que combina el Siglo de Oro con el estudio cómico actual y que integra amor, comedia, guerra y cultura, siempre manteniendo el humor como seña de identidad, en un juego escénico perfecto. EFE

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